Hasta siempre, Jordi

Hasta siempre, Jordi

Jordi Bargalló disputó ayer su último partido con la camiseta del Liceo. La despedida de la leyenda verdiblanca fue muy emotiva, con un Palacio de los Deportes entregado a este jugador, en el día en que también decían adiós al club coruñés su hermano Pau, Oriol Vives (que, por molestias en un hombro, ni siquiera pudo jugar) y Germán Nacevich. 
Pero, sin duda, el gran protagonista fue Jordi. Tenía la tristeza por irse de una ciudad que es la suya, y también por no haber conseguido que, en esta última comparecencia con la camiseta verdiblanca, no haya podido dejar al Liceo en el segundo puesto de la Liga. El Vic, sufriendo mucho, empató ayer a cinco tantos en Riazor, en un encuentro en el que Jordi Bargalló fue protagonista tanto por sus dos goles como por recibir la única tarjeta azul del choque.
La primera parte fue tremendamente explosiva. La ocasión lo requería, con tanta emoción en la pista y en la grada. Transcurría el minuto dos cuando Cristian Rodríguez adelantaba a los de Fernando Pujalte. Sin embargo, poco le duró la alegría al conjunto de Osona. Jordi Bargalló demostró sus ganas de agradar al público de Riazor, con el primero de sus goles.
No se conformó el Liceo, que aprovechó el desconcierto de su rival para seguir anotando. Josep Lamas puso por delante a su equipo en el minuto cuatro, y en el seis otra vez apareció Jordi Bargalló para hacer más bonito este día tan especial.
El 3-1 daba tranquilidad y afianzaba las opciones de subcampeonato del equipo de Carlos Gil. Pero el Vic también quería acabar segundo, y siguió mostrando su peligro.
El intercambio de golpes no había cesado. Cristian Rodríguez nuevamente batía a Malián en el once, pero Nacevich se sumó a la fiesta en el quince y volvía a poner al Liceo con dos tantos de ventaja (4-2). La batalla continuaba y aunque Bancells colocaba en el dieciséis el 4-3, en el veinte Josep Lamas anotaba el quinto para los coruñeses, y con el 5-3 se llegó al descanso.
Comenzó la segunda parte y el Vic tuvo una gran oportunidad para reducir las diferencias. Bancells dispuso de un penalti que no aprovechó.
A partir de ese momento, el encuentro se tranquilizó en cuanto a goles, pero no en tensión y nervios. Los dos equipos no hacían concesiones, y fueron sumando faltas. 
Los árbitros tambien fueron inflexibles, y en el minuto 39 mostraron una tarjeta azul a Jordi Bargalló. Y en la posterior falta directa, Ferrán Font situaba un inquietante 5-4 en el marcador.
Poco después, llegó la décima infracción del Vic. Ante Grau se situó Pau Bargalló, pero el de Sant Sadurní no fue capaz de poner el 6-4. Sí llegó, en cambio, el 5-5. Romá Bancells anotaba en el 42 y el empate era suficiente para que el Vic defendiera la segunda posición. Los coruñeses lo siguieron intentando, pero al final fue imposible y se tienen que conformar con la tercera posición, por detrás de Barça y Vic.
Un puesto que se puede considerar más que satisfactorio teniendo en cuenta las diferentes plagas de lesiones que ha sufrido la plantilla de Carlos Gil a lo largo de la temporada.
En esta última jornada de Liga, el Reus finaliza cuarto, por delante del Vendrell, quinto. Y el Alcoy se salva, mientras que baja el Lloret.

Hasta siempre, Jordi

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