Un punto de prestigio

alberto torres 
a coruña

El Depor consiguió un empate de absoluto prestigio en el Camp Nou igualando los dos goles del FC Barcelona en los minutos finales y aguantando el marcador ante uno de los mejores equipos no solo del mundo, sino de la propia historia del balompié.
El equipo saltó al césped con las ideas muy claras. Defensa a ultranza con muchas ayudas y balones largos para buscar las puntas. Víctor situó un 1-4-4-2 sobre el verde catalán en el que Fayçal Fajr actuaba por delante de los dos arietes formando, en ocasiones, un rombo al más puro estilo de los ochenta.
El entrenador también reforzó las bandas con Laure y Navarro en los laterales y, por delante, Juanfran y Luisinho. Con estos argumentos el equipo blanquiazul compitió con los culés y, por momentos, los puso en apuros. No obstante, y siguiendo el guión establecido, fue el Barcelona el que comenzó dominando, disponiendo Luis Suárez de una clara ocasión para batir a Lux a los cuatro minutos de partido. El balón se fue fuera con media portería para marcar. Probó Iniesta en el 10 y Messi en el 13. Sus disparos tampoco vieron puerta.
A los 14 minutos el Depor dispuso de una ocpión nítida para anotar. Una contra a la banda, un balón servido por Juanfran y un remate de Jonathan Rodríguez, a las piernas de Bravo, conformaron la mejor jugada del equipo coruñés en vanguardia. Esta acción tuvo continuidad y, por unos minutos, el cuadro blanquiazul jugó en campo catalán, incluso dispuso de un córner, pero los locales asumieron de nuevo el mando del partido.
A los 21 probó Luis Suárez de cabeza, repitió el uruguayo con un disparo a los 28, Messi en el 30, Suárez otra vez en el 31, Dani Alves en el 34... El Depor se defendía bien, con ayudas constantes y solventaba las acciones ofensivas locales.
Pero apareció Messi. ‘Es lo que tiene’. A los 38 minutos una falta en la frontal hecha por Luisinho daba la opción del disparo directo para el argentino. El mejor jugador del mundo la mandó sobre la barrera, a medio metro del palo, sin que nadie pudiese hacer más que mirar. El Depor, con el 1-0, siguió con su mismo discurso. Replegado con siete hombres y atacando con tres jugadores. Nada de volverse loco. Aguantó un nuevo disparo de Luis Suárez, otro de Messi, y se fue al descanso perdiendo por la mínima y con buenas sensaciones.
El entrenador deportivista no esperó demasiado para hacer cambios y fue dando entrada, de manera escalonada, a su corto pero fiable ‘fondo de armario’.
Juan Domínguez, Luis Alberto y Cardoso renovaron el medio del campo, mientras Luis Enrique aguantaba con su plantel inicial. El Deportivo dispuso de las primeras ocasiones de ataque en la segunda parte pero faltó definición y concreción en los metros finales. Tras unos segundos de dominio, pasó de nuevo el Barcelona a ocupar el campo y a manejar la pelota mientras el Depor seguía con sus siete hombres por delante de la frontal y atacaba con tres. El partido parecía equilibrarse por momentos pero en el minuto 61 Rakitic sacó un zarpazo desde 30 metros que supuso el 2-0. El Depor no se desencajó. Siguió con su planteamiento. 
Volvió a defender bien y a buscar sus ocasiones. Avisó Lucas con un gol anulado por fuera de juego en el 74 y no perdonó en el 76, anotando el 2-1 a pase de Cardoso, un debutante que rayó a gran altura.
El Barcelona quiso sentenciar pero era tarde. Sus contras fueron cortadas por el Depor, que intentaba plantarse de nuevo en el área contraria. Así, en el 85, Lucas Pérez volvió a encarar por el costado izquierdo, habilitó para la llegada de Álex Bergantiños y el de la Sagrada Familia batió a Bravo de un disparo seco y colocado. El equipo galaico defendió con todo hasta el final, hizo enorme el punto y, con los seguidores blanquiazules frotándose los ojos entre abrazos y alegrías, puso el broche a una nueva visita al Camp Nou. España sigue con la boca abierta ante la seriedad y el rendimiento de este equpo. Mucho Depor. Enorme. n