Un protocolo adaptado al deporte ‘no profesional’ y con ‘lagunas’

Un protocolo adaptado al deporte ‘no profesional’ y con ‘lagunas’
Rodríguez Uribes, Ministro de Cultura y Deporte, durante una reciente reunión | efe

El protocolo sanitario para la vuelta a la competición del llamado deporte no profesional, entre el que se incluye la Segunda B, fue un verdadero caballo de batalla del Consejo Superior de Deportes que preside Irene Lozano.

La dirigente presentó un primer documento a principios de mes que causó un gran revuelo entre las diferentes federaciones, entre ellas la española de fútbol, donde exponía la obligatoriedad de realizar test PCR antes de cada partido. Un gasto inasumible para los clubes y que creó una gran polémica. 

Por porcentajes
Dentro del protocolo también está la limitación de aforo. Se ha establecido un aforo limitado de 1.000 personas en recintos deportivos al aire libre y de 500 en espacios cerrados. Muchos clubes de fútbol, entre los que se encuentra el Deportivo, consideran que sería más lógico que se realizase esta limitación por porcentajes, ya que no todos los estadios tienen la misma capacidad en sus gradas. El club pide que, al menos, se deje entrar, con seguridad, al 30% del aforo en el campo. Una decisión que aún no ha sido tomada.

Ante el aluvión de críticas y la amenaza de la paralización de las competiciones el Rodríguez Uribes, Ministro de Cultura y Deporte y Alejando Blanco, presidente del Comité Olímpico español tomaron las riendas.

Varios cambios
Desautorizaron el documento presentado por Lozano e iniciaron jornadas maratonianas con las diferentes federaciones buscando el necesario quorum para poder sacar adelante un nuevo documento. 

En él, ya no se exigían las PCR, aunque sí que las consideraba recomendables. No obstante, presentaba alternativas como los test rápidos o serológicos. Se trata de un pequeño pinchazo en un dedo, de ahí se extrae sangre a la que se le aplica un reactivo que reacciona en caso de que detecte presencia de anticuerpos. Sirve para saber si la persona ha estado en contacto con el virus e incluso si ha pasado la enfermedad (en el caso de que presente anticuerpos IgM negativa e IgG positiva, anticuerpos que ayudan a la respuesta inmune si vuelve a haber contacto con la enfermedad). El problema de estas pruebas, aunque son mucho más económicas que los PCR, es que su fiabilidad es menor. No obstante, el CSD en su protocolo mira, también, hacia las Consejerías de Sanidad de las diferentes Comunidades Autonómas, como guardianas también del cumplimiento. Y no olvida que, todo esto, depende en gran medida de la situación epidemiológica tanto del país, como de la región en concreto. 

Pasos a seguir
El protocolo marca una serie de pautas en el caso de que se detecte un caso. Lo primero es aislar al positivo en su domicilio, la paralización de la actividad deportiva y la realización de test PCR en plantilla, cuerpo técnico y personal del club. 

Es necesario desinfectar las instalaciones. En el caso de que el resto de integrantes den negativo se puede retomar la actividad, mientras el contagiado pasa la cuarentena.

Se recomienda, además, hacer controles periódicos para prevenir casos futuros. Un protocolo el del Consejo Superior de Deportes para el deporte no profesional que tuvo que ser profundamente modificado y que continúa contando con importantes lagunas, que se evidenciarán con el inicio de las distintas competiciones deportivas.

Un protocolo adaptado al deporte ‘no profesional’ y con ‘lagunas’

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