11º-14º
jueves | 25 abril | 2024
El tiempo es oro y, en el caso del Deportivo, un equipo en estado de coma deportivamente y en riesgo de muerte si desciende a Segunda B, cada día cuenta. Por eso en las últimas jornadas se ha acelerado el proceso para que en el club se produzca un relevo inmediato, con cambio de poderes en casi todos los frentes (institucional y deportivo) sin esperar a que la anunciada dimisión del Consejo de Administración que encabeza Paco Zas se produzca en la Asamblea prevista para el 13 y 14 de enero.
En la situación actual del Deportivo, uno de los actores que más se juega es la entidad financiera Abanca, que aglutina prácticamente la totalidad de la deuda bancaria que tiene el club, algo más de 50 millones de un total de 59 (el débito del club se aproxima a los 90 millones).
Abanca, según algunas fuentes (la entidad financiera no lo ha confirmado), se ha está moviendo puesto que, además, quienes se atrevan a dar el paso en este complicadísimo momento para el club (tal y como ya se había avanzado en estas mismas páginas) necesitan tener previstos acuerdos con el banco para, en el caso de descenso, se pueda garantizar la viabilidad del Deportivo en la categoría de bronce del fútbol nacional.
Escenarios posibles
En este momento de la película, con el Deportivo colista de Segunda División a nueve puntos de la permanencia y con 22 partidos por disputar (66 puntos), el escenario de la pérdida de categoría se tiene muy presente aunque se intentará obrar lo que a día de hoy parece casi un milagro y lograr seguir la temporada que viene en el fútbol profesional español.
Con Abanca han establecido contacto Fernando Vidal, excandidato a la presidencia del club y el empresario Juan Carlos Rodríguez Cebrián. Los dos van de la mano en un proyecto para intentar salvar el Deportivo y preparado para tomar las riendas de la entidad desde ya. Según ha podido confirmar este diario, Vidal es el elegido. Cuenta con el beneplácito de Abanca y será el sucesor de Paco Zas.
Ley e interpretación
Articular el cambio en la dirección del club es el problema. La Ley de Sociedades de Capital prevé el cese de los auditores en cualquier Asamblea de Accionistas (como la de hoy) aunque no se haya establecido en el orden del día. Sin embargo, hay más confusión respecto al nombramiento de los nuevos dirigentes.
La resolución de la Dirección General de los Registros y del Notariado de 10 de mayo de 2011, establece que es factible, al cesar un administrador en una Junta, poder también, sin que ello conste en el orden del día, nombrar su sucesor.
El motivo de ese cambio inmediato de administrador tiene una razón de ser: evitar situaciones de acefalia (que el club quede sin administrador), que se tradujeran en la paralización de la vida social con sus evidentes riesgos así como en demoras y dificultades para proveer el cargo vacante. Sin embargo, está sujeto a interpretaciones y podría acarrear problemas en el futuro, así que la recomendación es evitar esa vía para ir más sobre seguro.
La otra opción pasa por convencer a Paco Zas de que, aunque la dimisión esté prevista en enero, el relevo ‘virtual’ se produzca ya para que así la nueva dirección pueda avanzar en las negociaciones con posibles fichajes y, si se considera oportuno, que parece que sí, se cierre un nuevo entrenador e incluso haya un cambio en la dirección deportiva.
De otro modo, esperar al 13-14 de enero implicaría aterrizar en la entidad con movimientos de salida de la plantilla pendientes (son necesarios para poder liberar tope salarial y acometer incorporaciones) y con el riesgo a perder posibles fichajes.
En todo caso, lo que se plantea es una candidatura de unidad, con el respaldo del máximo acreedor y que acepten (con o sin dar el apoyo de manera efectiva) los principales accionistas de la entidad, es decir, el expresidente Tino Fernández y Estrella Galicia.
