“Si existe la posibilidad de entrenar al Depor, ahí estaré”

Paco Jémez confirmó lo que había adelantado su representante a este diario: el Deportivo aún no se ha dirigido a él para contratarle. Sin embargo, en declaraciones a Cope, ha admitido que le seduce el proyecto blanquiazul.
“Hay muy pocos entrenadores a los que les pregunten si quieren entrenar al Deportivo y digan que no. El Deportivo es un equipo que en estos momentos está creciendo, tiene un futuro muy prometedor si se hacen las cosas bien, Coruña es una ciudad en la que encanta el fútbol, una ciudad que conozco y más allá de que pueda tener a mi familia aquí o no, que puede ser un punto a favor a la hora de elegir el equipo, estamos hablando de un club que puede tener un proyecto deportivo importante y eso es lo que necesito”, comentó.
“Cuando salgo del Rayo lo que voy a mirar es un proyecto que me permita conseguir cosas que hasta ahora no he podido lograr y el Deportivo es un equipo para hacer cosas bonitas para el futuro y, si existe la posibilidad, ahí estaré yo, que además estoy en paro”, añadió.
Paco afirmó, no obstante, que “del Depor nadie se ha dirigido” ni a él ni a su representante. La afición, en cambio, sí le ha transmitido el interés en su fichaje.
“Voy por la calle y me encuentro asombrado. Me encanta porque entiendo que es el cariño de la gente de a pie. Me dicen que si ya he firmado y les tengo que decir que no, que estoy con la familia. Me ha sorprendido el cariño y lo claro que lo tiene la gente, pero esto no es cuestión de lo que la gente quiera, hay dos partes que se tienen que poner de acuerdo y una de ellas indudablemente tiene que llamar a la otra. A mí nadie se me ha dirigido a día de hoy. No sé lo que va a pasar esta noche o mañana”, señaló.
El entrenador recordó que se le “ha relacionado con el Espanyol, con el Valencia” y sigue sin equipo. “Se ha dicho que iba a renovar con el Rayo. Claro, alguno tiene que acertar. Si me colocan en siete equipos y son los siete a los que le falta entrenador, alguno tiene que caer”, opinó.
El Rayo, con el que tiene contrato hasta el 30 de junio, le ha intentado renovar, pero no ha habido acuerdo. “En esta vida no quiero descartar nada. Hablé con el presidente y las posturas están muy alejadas. Yo no quería una negociación con el Rayo. Le abrí la puerta a entrenar en Segunda pero con dos connotaciones muy claras: una era mi salario, que indudablemente lo iba a rebajar, y otra, referente al ámbito deportivo del club, en el que tenía que ser una persona importante a la hora de decidir todo lo que se generara. No pretendía ser el que único que decidiera, pero sí una persona importante para tomar decisiones y que sin mi decisión no pudiera salir un jugador, por ejemplo. El club hizo el esfuerzo que pudo hacer”, dijo.
Si el técnico busca un entrenador con carácter, Paco cumple el perfil. “Tengo el carácter que tengo y me gusta el fútbol que me gusta y necesito un club que confíe en mí como el Córdoba o el Rayo y me deje trabajar. Ni quiero cambiar mi carácter ni lo necesito y mi carácter creo que es perfecto para mi profesión, para ser entrenador”, indicó.
También afirmó que no se inmiscuye en lo que no forma parte de su parcela. “Me encargo de mi trabajo y no me quiero meter en el de nadie más, pero tampoco dejo que nadie se meta en el mío. No me voy a meter nunca en la parcela del director deportivo aunque tiene que contar con el entrenador para formar la plantilla. Entiendo los límites de mi trabajo, aunque tiene unos brazos muy largos porque tengo que estar relacionado con todo el mundo”, aclaró.
A Víctor se le fue el vestuario de las manos. Paco es intransigente en ese sentido. “Nunca” ha perdido la autoridad. Y añadió: “Creo que no me va a pasar. Aunque en el mundo del fútbol es conveniente no decir nunca ni siempre. Pero por cómo soy, cómo trato al jugador, cómo me gustan las cosas, me has visto encararme con un jugador, agarrarlo de la pechera, pero he entablado relación con ellos y nunca jamás he tenido un problema. Hablo muy clarito, me gusta que la gente hable claro y atajar los problemas. El entrenador se tiene que dedicar a solucionar los problemas. Es más, uno de mis fuertes es ganarme al vestuario. ¿Que algún día surge un problema con alguien? Entiendo que solo hay una manera de hacer las cosas. El grupo tiene que ir por donde tiene que ir y si llega esa situación solo hay una salida, o él o el entrenador. El grupo por encima de todas las cosas, incluso por encima del entrenador”.