10º-19º
viernes | 19 abril | 2024
Con 21 puntos en 23 jornadas y después de haber abandonado la posición de ‘farolillo rojo’, el RC Deportivo de La Coruña ya tiene en mente su próximo objetivo, que no es otro que salir de la zona de descenso.
Para ello deberá blindar su estadio de Riazor en una segunda vuelta en la que no dispone de demasiado margen de error.
A un punto de la línea que marca la permanencia, los herculinos afrontan mañana domingo un duelo clave frente al líder, el Cádiz, ante el que podrían aprovechar su inercia ganadora de tres envites seguidos para proseguir con su escalada.
Hasta fin de curso los blanquiazules tienen que disputar diez partidos como locales, en los que deben blindar un Riazor que a buen seguro que presentará una afluencia de espectadores que facilitará la obtención de buenos resultados.
Ahora mismo, según los cálculos del propio entrenador Fernando Vázquez, serían necesarias diez victorias para salvar el pellejo; una buena parte de ellas podrían llegar en Marineda, frente a rivales que luchan por objetivos dispares.
Por una parte, los coruñeses pelearán contra aspirantes al ascenso directo, como mañana ante el Cádiz, el 16 de febrero frente al Girona o el 25 de abril con el Huesca.
También se medirán en el segundo segmento de la campaña a adversarios directos en la pugna por la salvación como el Lugo (1 de marzo), Sporting de Gijón (15 de marzo) o Extremadura (10 de mayo).
En el último compromiso de Liga del ejercicio actual los deportivistas recibirán a una de las revelaciones del año en la categoría de plata, un Fuenlabrada que podría aterrizar en Riazor con los deberes hechos.
Sin duda será una decena de compromisos de alto voltaje en los que, tal y como demostró ante Tenerife o Racing de Santander, el Deportivo tiene la oportunidad de devolverle a su grada parte del esplendor del pasado reciente perdido.
