11º-14º
jueves | 25 abril | 2024
El Deportivo respondió con una victoria a la oportunidad que se le brindaba de abrir hueco con sus perseguidores y lo hizo en un partido en el que el marcador indica de manera perfecta lo que ocurrió. Por los pelos.
Fernando Vázquez alineó el once esperado salvo por la presencia de Juan Carlos, cuando en la previa Antonio Núñez parecía titular. Con la vuelta de Germán Lux a la portería, la titularidad del canterano fue la otra novedad en el planteamiento inicial del técnico herculino.
La apuesta por el talento del coruñés le dio la razón al entrenador. En el minuto dos daba el pase de gol a Toché, que ponía el 1-0 en Riazor al recibir por el lateral del área y marcar cruzado. El encuentro comenzaba de manera inmejorable para los intereses blanquiazules.
Se torció el guión en el minuto cuatro con la lesión de Salomao. Sissoko fue el elegido por Fernando Vázquez para equilibrar de nuevo las fuerzas y mostró mucha movilidad amén de mejor tono físico que cuando llegó en enero. El Depor dominaba, era mejor, y aunque el Hércules quería atacar sus jugadas morían en la férrea defensa coruñesa.
La percepción cuando evolucionaba el cuadro herculino era bien distinta. La sensación de peligro era clara. Así, en el 19, Rabello conectaba un gran pase vertical que dejaba a Juan Carlos con ventaja para el disparo delante del portero. 2-0 con celebración incluida de Vázquez corriendo por la banda. El Depor ponía el partido a buen recaudo antes de llegar a la media hora.
Esperando al rival
Con el tanteador tan favorable la prisa no era buena consejera y los coruñeses leyeron bien el choque hasta el final de la primera parte. En el 26 intentaban una nueva jugada con un balón de Rabello al segundo palo al que no llegaba Toché. Los blanquiazules esperaban al rival y salían buscando la contra. Dos fueras de juego antes de cumplir la media hora, cuando en otros partidos ni se cae en la antireglamentaria acción, evidencian que el equipo jugaba más en territorio rival. El Hércules atacó en los minutos finales buscando acortar distancias pero la defensa coruñesa supo llegar con el 2-0 al descanso del encuentro.
El primer tiempo había sido para el Depor pero el panorama estaba a punto de cambiar de manera radical. Los herculinos pasaron del blanco al negro.
En el minuto 50, Portillo, recién ingresado en el terreno de juego, batía a Lux, que no llegaba a su palo más cercano con la velocidad suficiente para atajar el esférico. El Hércules entraba de nuevo en el partido.
A partir de ese momento el equipo alicantino dominó al cuadro coruñés de cabo a rabo. Se hizo dueño del encuentro, máxime cuando en el 62 el Depor se quedaba con diez jugadores por la expulsión de Luisinho, que se encaraba con el asistente, avisando éste al colegiado de tal afrenta. Roja directa.
En el último suspiro
El cuadro visitante apabullaba al local y se mascaba el empate. Fernando Vázquez lo sabía y dio entrada a Seoane por un exhausto Sissoko. Era el minuto 67 y el Depor cambiaba el dibujo táctico para defender con cinco jugadores, tres en el medio del campo y sólo Toché en punta. Realizada la variación llegó el empate del Hércules en una acción en la que, curiosamente, el lateral derecho blanquiazul, Seoane, no llegaba para estorbar el disparo de Sisokko.
Con la igualada en el marcador el rival pudo sentenciar. En el 73 Héctor Yuste mandaba la pelota al palo, en el 75 llegaba una nueva ocasión alicantina. El Depor se defendía como podía, las fuerzas comenzaban a fallar y, quien más y quien menos, daba por bueno el punto a tenor de la situación del partido.
Aún así faltaba alguna ocasión de un Deportivo que no había tirado a gol en toda la segunda parte. Y la tuvo. En el 84 Toché arrancaba por el medio del campo, dejaba la pelota para Seoane y se iba al remate, el canterano centraba sobre la línea de fondo y el punta blanquiazul anotaba el 3-2, de cabeza, ante la alegría de Riazor, que casi no se creía lo que veían sus ojos. De ahí al final el oficio salvó el triunfo. Los de Vázquez defendieron los tres puntos con contundencia y festejaron una victoria que pudo haber sido un empate o una derrota. El Depor llega a los dos tercios de Liga en una situación de privilegio. Sufriendo, eso sí, pero en lo más alto.
1. primera parte dominada por los herculinos
El Depor se marchaba con un 2-0 al descanso que invitaba al optimismo de cara a cerrar un partido ‘cómodo’ en Riazor.
2. toché aparece, una vez más, al final
El Depor está abonado a los minutos finales y, en la única jugada de ataque de la segunda parte, Toché marcó el 3-2 definitivo.
