Construyendo el nuevo Depor

El Deportivo trabaja en varias líneas de actuación para cambiar de una manera importante la imagen de la entidad.
EL futuro es casi presente y hay que adaptarse a los nuevos tiempos. El presidente del club, Tino Fernández, lo explicó hace unos días en estas páginas: “ahora, desde dentro, me doy cuenta de que el patrimonio del Deportivo es la gente”. No hay mucho más. Sí un nombre, una historia y una ‘marca’ pero hay que fortalecer la estructura con proyectos razonables, duraderos y que den beneficios.
En este sentido, sin plazos aunque con objetivos temporales, se trabaja para conseguir que el club tenga un museo, una vía de ingresos más. Además sería un nuevo espacio de este tipo a sumar a la importante oferta que tiene la ciudad. La Fundación será una realidad, creando una entidad benéfica que favorecerá no sólo al club, sino al tejido social que le rodea.
Con las nuevas deportiendas, al margen del comercio en la red, se intentará llegar a los aficionados al fútbol que puedan ‘comprar’ Depor. A la de Riazor se le unirá la del centro comercial Marineda City pero el consejo es ambicioso y podrían salir más zonas a colación, como la del puerto, cerca de los cruceros que visitan (y gastan) en la ciudad.
Las oficinas del club se trasladarían a Riazor y lo concerniente a fichajes, cantera y fútbol en general a Abegondo. El sueño de tener una sede emblemática sigue ahí, pero dependerá de muchos factores. El primero de ellos es que la Plaza de Pontevedra puede pasar a la historia, quedarse como sede presidencial o incluso prescindir de este inmueble, dos pisos separados que son poco operativos.
La imagen es importante, el ir sumando patrimonio, aunque sea poco a poco, fundamental. Está en construcción un nuevo Deportivo, el que encarará el futuro más ilusionante.