A romper las estadísticas

A romper las estadísticas
bruno gama se dispone a chutar a puerta para anotar el gol de la victoria en la primera vuelta ac

Menudo partido el de esta tarde. Un choque que puede ser calificado de muchas formas, decenas de tópicos para definir otro envite en el que el Deportivo no puede perder, de hecho necesita la victoria para salir del último puesto de la tabla cuanto antes, algo que no es sinónimo de permanencia pero, al menos, permitiría mirar el futuro con algo más de optimismo.

A Coruña no cree en milagros, se aferra a las posibilidades, que las hay, pero sabedora de que la tarea es difícil. Incluso ganando hoy y repitiendo ante el Zaragoza nada estará hecho. Si se consigue no caer prematuramente, no ahogarse ‘ya’, la sensación que hay es que el Depor tendría que pelear hasta el último partido para llegar a la arena. Luego veremos si se cumple lo de morir en la playa.
Así que las cábalas son muy claras. El equipo de Vázquez necesita la victoria y la buscará en un domingo en el que los herculinos intentarán romper un montón de estadísticas negativas.
La primera es la propia posición de colista, que pesa siempre a un plantel. Desde el fondo de la Liga, donde habitan los fantasmas del descenso, intentarán los coruñeses batir al Mallorca. En un campo que se da fatal, con una sola victoria en los últimos doce encuentros. Por si fuera poco el cuadro gallego no ha encadenado nunca dos victorias seguidas en esta temporada, algo que también pretende estar tarde, como conseguir el primer triunfo fuera de casa, que tampoco ha llegado ni de la mano de José Luis Oltra ni de Domingos Paciencia. Está claro que es un partido para reventar el pasado y, de ganar, mirar al futuro con decisión para enfrentarse al Zaragoza el próximo sábado.

efecto vázquez
El entrenador ‘se lo está currando’ y de lo lindo. Además de su trabajo como técnico, de volcarse con el equipo, de buscar lo mejor para sus futbolistas, el preparador ha calado hondo en la afición en pocas jornadas. Cuando llegó a A Coruña algún deportivista podría ser reticente por el pasado celeste, los derbis arcanos con el Compostela, pero una vez que han visto trabajar al de Castrofeito, una vez que han escuchado su discurso, están ‘a muerte’ con el entrenador blanquiazul.
La evidencia está en el entrenamiento del viernes, con 4.000 seguidores coreando el nombre del técnico coruñés. Este club, este equipo, esta ciudad, son de otra pasta, para lo bueno y para lo malo.
Posiblemente en otro lugar de la geografía española (por no concretar más) a estas alturas se daría por perdida la esperanza, por descendido al equipo, y volverían a Riazor los 10.000 de las épocas regulares de Segunda. Pero esto es el Depor, su ciudad, su provincia, Galicia...
Lejos de darlo todo por perdido hay fe, posiblemente más que nunca en los tres últimos meses. Vázquez la ha transmitido a la grada y a sus jugadores, la comunión es total y el equipo llegó ayer a Palma de Mallorca con toda la concentración y toda la mentalidad de llevarse los tres puntos en juego.
Aunque el empate sirve para ganar el golaverage particular con los bermellones hay que sumar de tres en tres. Si no, no darán las cuentas. El equipo coruñés necesita seis victorias, al menos, para soñar con llegar vivo al final del campeonato, así que no puede permitirse el lujo de pensar en el empate. Otra cosa es cómo se dé el partido, sus pormenores y vicisitudes.
En estas jornadas en las que el parón de Liga ha invitado a los periodistas al reportaje y al archivo se han publicado varios clavos ardientes a los que agarrarse. Que si otros colistas hicieron la hombrada antes que el Depor; que si el calendario de los rivales en la lucha por no descender es peor para los contrarios que para los blanquiazules, que si la victoria del Celta pude dar moral o que el equipo coruñés suele ganar tras hacerlo en el derbi...
Todo vale para pensar en positivo pero la clave para ganar esta tarde es la de siempre. Actitud, esfuerzo, coraje, generosidad en las ayudas a los compañeros, jugar en equipo, no descuidar la defensa, aprovechar las ocasiones y tener una pizca de buena suerte. La fórmula mágica tiene estos elementos que, lamentablemente no se han dado demasiado en la actual temporada salvo en honrosas excepciones.
Así las cosas el Depor, con un pie en Segunda a pesar de haber ganado al Celta, seguirá aferrado a las pocas pulsaciones que tiene e intentará la hombrada de ganar su segundo choque consecutivo que, si bien no supondría salir del descenso, sí dejaría tocado al Mallorca, avisado al Zaragoza, preocupado al Celta, nervioso al Osasuna y temeroso al Granada. Hay que jugar con la ansiedad del rival de turno y de los que acompañan en la lucha en la parte baja de la tabla, eso sí, intentando que la propia ansiedad sea un acicate para conseguir un rendimiento adecuado y, si puede ser, un 0-1.

A romper las estadísticas

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