Zona Obelisco y Proyecto Quimions organizan una gala solidaria de humor en el Colón

Para que el día a día de los niños con cáncer sea un poquito más azul, la Asociación Comercial Zona Obelisco y Proyecto Quimions organizarán el 24 la gala “Palabra de Mujer”, que pondrá en el escenario del Colón al dúo musical In Femenino Plural, con Silvia Penide y Carla López a la guitarra  junto con las humoristas Yésica Val, Adelaida Pittaluga, Diana Sieira, Iria Mourón, Marta Mato y Sara Escudero. 
Ellas conducirán a la butaca por la palabra que provoca la risa y la que viaja en canción y el espectáculo tendrá dos fines. Por un lado, tratar de humanizar diversas áreas del hospital Materno Infantil y por otra, gritar en contra de la violencia de género, a través de nueve mujeres en clave de humor. 
Patricia Campos, impulsora de Proyecto Quimions, señaló ayer en la presentación que la colaboración con Zona Obelisco está siendo esencial con la cesión del centro comercial Papagayo para desarrollar el proyecto y ahora implicándose en la gala. 
Por su parte, el responsable del colectivo, Antonio Amor, señaló que la colaboración es algo natural: “Quixemos involucrarnos dende o primeiro momento, e colaborar na medida do posible”. Con esta base, se tejió un show que pilotará María Solar y para el que las entradas tienen un precio de diez euros sin distinción de espacios porque la intención es que la gente se implique llenando el teatro, “apoiando ás artistas que esa noite subirán ás táboas”, según comentó Patricia Campos. En el acto estuvieron también presentes Yésica Val, una de las humoristas participantes, y Carlos Bau, músico coruñés y compositor do tema da campaña Quimions.
Proyecto Quimions comenzó a trabajar para mejorar la calidad de vida en el hospital de los niños con cáncer juntando una comunidad animada con capa de superhéroe y tejida por voluntarios que llenó la planta de oncología y tapó los goteros de la quimioterapia. La iniciativa tuvo tal repercusión que el número de sacos sirvió para forrar las bolsas de otros centros gallegos. 
A golpe de aguja e hilo, decenas de asociaciones y particulares pusieron su granito de arena para que esas salas de tratamiento fueran menos grises. 
Entre otras llamadas, también recogió a través de distintas peluquerías mechones largos para llevarlas al banco de pelucas y que ninguna enferma se quedara sin esa opción para paliar la falta de pelo. n