8º-18º
martes | 23 abril | 2024
Hay a quien al verano se le hace siempre demasiado corto, que nunca se harta de días luminosos, de tardes cálidas en las que caminar con camiseta y sandalias, de jornadas enteras en la playa, sacudiéndose la arena de los pies, de conciertos todos los días y verbenas todas las noches. Esa gente está de enhorabuena: el delegado en Galicia de la Agencia Española de Meteorología (Aemet), Francisco Infante, anunció ayer los resultados de un estudio que señala que en A Coruña ciudad (los datos se recogieron en sus estaciones meteorológicas, aunque se extrapolan a un área más amplia) el verano se adelanta 5,75 días y finaliza 6,3 días más tarde. Es decir, tiene 12,1 días más.
Es decir, que el verano no comienza hoy, como fija el canon, sino que ya lo hizo el domingo pasado. “No se trata del verano astronómico –advierte Infante– que es inamovible (aunque nunca se sabe lo que pueda pasar en milenios) pero desde el punto de vista climático, el verano se ha alargado”. El resultado es que, ahora, el mes de septiembre ha dejado de ser otoñal para convertirse en totalmente veraniego.
Como es una cuestión climática, Infante reconoce que la actual situación se puede hace extensiva a la mayor parte de la provincia. Pero como científico, hace hincapié en que los datos se recogieron en A Coruña (así como en Vigo y Ourense) donde existe un centro meteorológico con una serie lo suficientemente larga de estudios que permita poner de relieve los efectivos del cambio climático en el último decenio. Pero Infante va más allá: “Desde los años ochenta, el verano se ha alargado un mes”.
Tercil superior
Por supuesto en las Rías Baixas el verano se ha alargado aún más, aunque no demasiado. En Vigo comienza seis días antes y termina 8,4 días después. “No es nada curioso, hay diferencia pero no es exagerada porque allí los veranos suelen ser más largos que aquí, en el norte”. Lo más probable es que el verano sea más cálido de lo normal, aunque las proyecciones a largo plazo no son lo suficientemente fiables como para determinar cuánto. “No se puede identificar pero se sitúa en el tercil superior”, señala.
Es decir, que los meteorólogos dividen la temperatura, según los datos estadísticos recabados, en tres partes: tercil bajo, medio o superior. Y este verano el mercurio apuntará a la franja más alta.
Sin embargo, se esperan que las precipitaciones sean semejantes a las de otros años: es decir, que lloverá, pero poco.
Desde los años 70
Los meteorólogos llevan mucho tiempo notando el cambio climático. El estudio publicado en la página web de Aemet, y cuyo autor es César Rodríguez Ballesteros, muestra que este fenómeno empezó desde los años 70, que es de donde parte en el estudio. “Pero los años 70, sobre todo los primeros años, fueron fríos y húmedos”, explica Infante. En cuanto a la precipitación, no ha variado mucho, pero sí en lo que respecta a la temperatura, que no deja de subir.
Estos días el tiempo todavía es inestable, y el sol todavía se mezcla con las nubes, que descargan lluvia de manera intempestiva. Pero con el verano tan largo que aún queda por delante, habrá tiempo de añorar la lluvia.
