Las ventas en las rebajas de verano se desploman un 10% con respecto a 2012

Hace tiempo que los períodos reglados de rebajas dejaron de tener sentido por la decisión del Gobierno central de permitir los descuentos en cualquier época del año. Sin embargo, los comerciantes insisten en la importancia de que el consumidor tenga unas fechas de referencia estables y, por ello, las antiguas rebajas de verano no han pasado de moda. Pero el consumo todavía no remonta y, según la Federación de Comercio de A Coruña, “las ventas han bajado una media de un 10% con respecto al año pasado”.
Restan dos semanas hasta final de mes y los comerciantes todavía tienen la oportunidad de mejorar las ventas de rebajas pero en el sector son escépticos ante esa posibilidad. El presidente de la federación de comerciantes, Miguel Agromayor, aclara que sin tener en cuenta los negocios de souvenirs –“cuya venta ha aumentado con respecto a la media del año pasado” debido a la masiva afluencia de visitantes de este verano– la facturación caerá un 10%, una cifra que se acumula a los malos resultados cosechados por el sector en lo que va de 2013.
Aun siendo cauto, confía en que “la influencia turística se deje notar algo porque entró muchísima gente” pero, augura, no será para nada comparable con los beneficios que obtienen tanto la hostelería como los hoteleros.
“Los resultados de las rebajas van por barrios, en las zonas más céntricas hay la sensación de que han ido un poco mejor que otros años, pero sin echar cohetes, y en otras zonas ha seguido la misma dinámica”, destaca en este sentido el presidente de la Unión de Comercio Coruñesa, Miguel Suárez. “El aspecto positivo es que no seguimos bajando; hay que enfocar las cosas con optimismo”, invita, y coincide en que también nota en las calles una presencia mayor de turistas. Los empresarios agrupados en asociaciones como Distrito Picasso o Zona Comercial Obelisco intentan ser lo más positivos posible.

el español, "más gastador"
La presidenta de la Asociación Distrito Picasso, Belén Chaver, estima que “se ha vendido un poco menos que el año pasado” a tenor de lo que le han comentado en algunas tiendas.
“La cosa está tranquila aunque nos ha ayudado mucho el tiempo”, opina su homólogo en la Zona Comercial Obelisco, Antonio Amor, que recuerda que “la calle está llena de gente pero no se ven muchas bolsas”. Así, destaca que los niveles de ventas siguen en sintonía con los del año pasado.
En cuanto a los visitantes, afirma que no es el turista al uso el que más gasta, sino que el cliente de verdad es el coruñés “que trabaja fuera y viene a pasar agosto aquí”. “Los barcos ayudan pero el visitante de aquí es infinitamente más gastador”, zanja.
“Parece que se palpa una pequeña mejoría en los grandes y esperemos que se traduzca pronto en el pequeño comercio pero el problema es el paro, porque el parado no consume”, resume Agromayor. Al ser preguntado por la bajada de las colas del INEM y la influencia que eso puede tener en los comercios indica que se traducirá “más tarde, en dos o tres meses”. n