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miércoles | 8 mayo | 2024
Sencilla idea: recuperar fincas vacías e improductivas para convertirlas en pequeños huertos de agricultura ecológica. Ese era el punto de partida del colectivo de arquitectos Desescribir cuando presentó su proyecto a los vecinos de Feáns, allá por el 2009. Casi tres años después, la Asociación Cultural e de Desenvolvemento Rural das Hortas do Val de Feáns mantiene el testigo de aquella idea inicial cultivando cuatro grandes fincas que se dividen en 45 huertos. Pero las parcelas se han quedado pequeñas y la asociación cuenta ya con lista de espera de personas interesadas en contar con su “pedacito de tierra” para desarrollar su pasión agrícola. “Ahora mismo tenemos medio centenar de socios en los huertos, pero en la asociación ya hay apuntada más gente que aún no tiene espacio para cultivar pero que puede participar en otras actividades”, explica el portavoz de la entidad, Javier Mortes.
Mortes también subraya que, además de hacer falta más terrenos para dar cabida a más usuarios, se han encontrado con el problema de que una de las fincas se han encharcado por las lluvias de esta primavera. “Intentaremos limpiarla y drenarla en verano para aprovecharla, pero nos sigue faltando espacio”, apunta.
Dinamizar el barrio > Los vecinos, por su parte, valoran muy positivamente estos años de convivencia con los hortelanos “amateurs”. Pese a que al principio recelaban para ceder sus terrenos y dudaban de la viabilidad del proyecto, ahora ya hay entendimiento y buena disposición por ambas partes. “Aquí todo el mundo tiene su finca, por lo que no están en la asociación, pero les encanta ir a ver como trabajan los de los huertos”, señala el presidente de la asociación de vecinos de Feáns, Jose Ramón Cernadas.
Y es que, como expertos labradores, los vecinos de Feáns conocen al dedillo el terreno del valle y las posibilidades de cultivo. Para ellos también es una ventaja que se aprovechen las fincas que están abandonadas como una manera de acondicionarlas. Desde la asociación vecinal también consideran que es una buena forma de dinamizar el barrio y de preservar su carácter “tradicional”.
Por ello, confirman que hay buena disposición entre los propietarios para ceder nuevos terrenos en los que instalar más huertas. “Hay un solar en la parte baja de la calle principal que se podría limpiar y arreglar”, afirma Cernadas. El portavoz vecinal también se muestra a favor de que se aumente el número de huertos urbanos en A Coruña, como los que habilitará el Ayuntamiento en Novo Mesoiro. “Son una buena idea para que la gente joven aproveche ese espacio, que además está muy bien orientado para que crezcan las plantas”, afirma. No obstante, Cernadas destaca sobre todo las bondades del valle de Feáns para el cultivo: “La tierra de aquí es la crème de la crème”.
Ganando adeptos > En el caso de Novo Mesoiro, el proyecto creará 89 huertos de ocio en un terreno municipal situado entre las calles de Fragas do Eume y Camino do Correlo. Se trata de una experiencia piloto que se pondrá en marcha el año que viene y que se sumará a la ejecución de la segunda fase del plan de acondicionamiento del parque y zonas verdes del barrio.
En otras zonas de la ciudad también se ha planteado la posibilidad de instalar huertos urbanos, como es el caso de los vecinos de A Gaiteira, que solicitaron a principios de año aprovechar las fincas abandonadas para cultivar sus propios alimentos. Una propuesta que también ha hecho el grupo de Esquerda Unida, que se ha centrado en la modificación del plan del polígono del Agra del Orzán para instalar una zona de huertas urbanas. La misma demanda se realiza desde el contiguo barrio de O Ventorrillo, donde los vecinos llevan años solicitando la instalación de una huerta en las inmediaciones del centro cívico de A Silva.
