Vecinos y comerciantes ven inexistente la política de participación de la Marea

El último conflicto entre el Ayuntamiento y los vecinos, en este caso de Os Mallos, porque no se informó del corte y reurbanización de la calle de San Vicente ha destapado una conclusión bastante generalizada entre distintos colectivos de la ciudad: el discurso de participación que lleva por bandera Marea Atlántica no es tal porque en la mayoría de las ocasiones no se cita a los afectados y cuando sí se hace pocas sugerencias ciudadanas llegan a buen puerto. Estas consideraciones de algunos de los colectivos con más peso en A Coruña vienen a dar la razón, de alguna manera, a las acusaciones contra el equipo del alcalde, Xulio Ferreiro, que ha hecho en las últimas semanas el grupo municipal del Partido Popular.
La concejala del PP, Begoña Freire, ponía en duda que la participación de la que presume el Gobierno local existiese de verdad después de que saltase la polémica por las obras en San Vicente, cuyas explicaciones no llegaron hasta última hora cuando el malestar cundió entre los vecinos y los comerciantes.
“Creemos que como interlocutores no hemos tenido la oportunidad de hablar”, afirma en un análisis general el presidente de la Federación Unión Comercial Coruñesa, Adolfo López, que eso sí asegura que la falta de apertura a la gente de a pie en las políticas municipales “es un problema endémico” de todos los gobiernos. No obstante, nunca antes se habló de la participación como si fuese una política específica de un Ejecutivo municipal.
Respecto a las cuestiones que le tocan de lleno al sector, López reconoce que cuando la Marea asume alguna de sus propuestas “queda desvirtuada siempre” con respecto a lo que reclamaron. Por ejemplo, recuerda que cuando la Concejalía de Empleo y Economía Social decidió convocar las subvenciones para el comercio por la vía de la “concurrencia competitiva se dijo que no era la forma adecuada y dio igual”. En cuanto al “Dillo ti” se dan por invitados pero opinan que ese tipo de encuentros “no tienen sentido con una finalidad sectorial”.

Escasa comunicación
Más allá del prisma comercial, López recuerda que también les gustaría opinar de temas de movilidad o infraestructuras porque son asuntos que les tocan de lleno a nivel empresarial.
Es decir, que estos asuntos juegan un papel fundamental en si hay clientes o no y querrían comentar cuáles son las prioridades. En todo caso, como la Federación de Asociacións de Veciños da Coruña e Área Metropolitana, la FUCC entiende que sigue teniendo los mismos derechos que con los anteriores equipos de gobierno. “Se basan mucho en los presupuestos participativos pero siguen existiendo las formas de participación que ya existían”, aclara la presidenta de la federación vecinal, Luisa Varela, haciendo ver que no se ha notado un cambio con respecto a anteriores mandatos. En todo caso este sería a efectos negativos. “Antes se nos comunicaba lo que iban a hacer también a partir del día en que comenzaba y ahora ellos nos cuentan que tienen intención de esto o lo otro pero no informan en el momento”, lamenta.
Aunque hay cierto contacto entre ambas partes, concluye que “no se avisa de las obras que van a acometer y los vecinos son los últimos en enterarse” y entiende que para conseguir algo “hay que ir a pedírselo porque ellos no vienen a preguntar directamente”.