Usuarios de Alvedro demandan una ampliación de los horarios de autobús

La vieja reivindicación de que se amplíen los horarios del autobús que cubre la ruta entre la terminal de Alvedro y el centro de la ciudad vuelve a retomarse. Las primeras quejas han empezado a fraguarse a través de las redes sociales, donde la Sociedad para el Desarrollo del Aeropuerto de Alvedro Vuela más alto recogió ayer la demanda y avisó de que presionarán a las administraciones para que negocien una mayor operatividad del itinerario.
Un nutrido grupo de pasajeros aclara que es necesario que haya más margen para hacer uso del transporte urbano en los desplazamientos a la ciudad si se quiere prestar un servicio de forma correcta.
Estos reprochan que los trayectos de la línea, que opera en concesión la compañía Cal Pita, acaben mucho antes de que aterricen en la pista los últimos vuelos de cada jornada. Por semana, el último autobús sale a las 21.45 horas tanto desde Alvedro como en el trayecto inverso desde el hospital Abente y Lago.
Sin embargo, ese horario se topa de bruces con la realidad, puesto que el último vuelo por semana desde Barcelona llega a la terminal a las 21.30 horas y a poco que se retrase –o si hay que esperar por las maletas– se hace complicado subir al transporte público. También los viajeros que aterrizan con Vueling desde Londres a las 22.05 horas solo tienen las opciones de coger el taxi, gastando más que en el autobús, o invertir una parte de su presupuesto en estacionar su vehículo particular en el parking de la infraestructura.
Una circunstancia similar padecen los ocupantes de las últimas frecuencias desde Madrid. Al margen de que Iberia suprima algunos vuelos de la noche en estos primeros meses del año, en los días laborales su aeronave suele llegar a las 23.15 horas, mientras que la de Air Europa (Globalia) lo hace a las 22.55 horas. Y eso si no se produce ningún retraso.
Con este panorama los pasajeros piden que el Ayuntamiento vuelva a proponer a la Xunta el refuerzo de la línea interurbana como ya hizo en 2015. Además, puntualizan que en verano todavía hay más personas que quieren utilizar el autobús y no pueden. Esta reivindicación se suma a la de muchos vecinos de A Corveira y Vilaboa que utilizan el transporte como una línea metropolitana cualquiera.