Una zapatería cuelga en su escaparte una carta pidiéndoles ayuda a sus clientes

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 p. g. l. > a coruña
  Desde ayer, María Valiño no solo es la propietaria de La Chola, una zapatería situada en el número 4 de la avenida de General Sanjurjo, sino también la responsable de una iniciativa que se ha convertido en una especie de “trending topic” entre los vecinos de Cuatro Caminos. Cansada de esperar a que las anunciadas campañas municipales de promoción del comercio local den sus frutos, y de que las grandes firmas ofrezcan promociones constantes fuera del período de rebajas, Valiño ha decidido recurrir a las únicas personas que pueden ayudarle a hacer frente a la crisis, y seguir adelante con su negocio: sus clientes. ¿Cómo? A través de una carta cuyos destinatarios son los propios consumidores coruñeses, en la que, desde la ventana de su escaparate, invita a colaborar para que la tienda se mantenga a flote.
“La situación está difícil y tenemos que apoyarnos entre todos”, cuenta Valiño, que lleva años trabajando en el sector, ahora a través de su local de Cuatro Caminos, y antes desde su antiguo establecimiento de Wenceslao Fernández Florez. La idea es simple, y el mensaje que se puede leer en el cristal también: “Queridos clientes, como bien sabéis llevo años dedicada al negocio del calzado, cosa que disfruto. Quiero continuar con vosotros, pero hay que pagar las facturas y la crisis existe!”, se puede leer en la carta pública de La Chola a sus clientes, en la que también asegura que la crisis le obliga a ofrecer “descuentos importantes... y que Deus reparta sorte”.
“No hay consumo, por eso lo que tratamos de decir con este mensajes es ‘por favor, ayúdanos y consume en el pequeño comercio’”, explica Valiño, que confiesa que fue su hermano el ideólogo de esta iniciativa. “Siempre se le ocurren cosas ingeniosas”, añade. Fue el pasado sábado por la noche cuando colgaron el cartel en el escaparate. Y desde entonces la propietaria de La Chola cuenta que fueron muchos los que se pararon a leerlo. Incluso hubo quien se animó a entrar en el establecimiento para felicitarlos.  

Efecto “viral” > Pero la medida no solo se convirtió en el tema  del día en Cuatro Caminos. También hubo quien se animó a seguir el ejemplo de La Chola, y copiar su iniciativa. Es el caso de la agencia de viajes Wanderer, situada en el número 17 de la calle de Concepción Arenal, al lado de la zapatería.
“Me gustó la idea y hoy por la mañana colgué un cartel similar”, cuenta Belén Santomé, propietaria de este negocio. “Queridos clientes, más que nunca es hora de apoyar al pequeño comercio”, se puede leer en la carta que redactó este establecimiento para tratar de hacer frente a la crisis, y suplir, según cuenta su responsable, la falta de apoyo por parte de las instituciones.
“Ya que nadie hace nada, pues nos dirigimos al cliente directamente”, asegura Santomé, que recuerda que son muchos los problemas a los que tienen que hacer frente los establecimientos: la falta de crédito de los bancos, los impuestos, las facturas o el escaso consumo, entre otros.
Sobre la posición adoptada por las administraciones públicas, considera que no se está haciendo nada por poner freno a esta situación. Tampoco ayuda, según cuenta, la reforma que se llevó a cabo en la avenida de General Sanjurjo, ya que hay clientes que ya no pueden llegar en coche hasta la tienda con la misma facilidad que antes.
En su caso, lleva 30 años en el negocio de los viajes, y 15 trabajando en el establecimiento de Cuatro Caminos. Recuerda que la situación cambió “muchísimo” desde sus inicios en el sector, hace ya tres décadas, hasta ahora. No solo por la aparición de internet, sino porque en estos momentos “la gente o no consume porque no tiene dinero, o si lo tiene, no lo hace porque tiene pánico”.

Una zapatería cuelga en su escaparte una carta pidiéndoles ayuda a sus clientes

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