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sábado | 20 abril | 2024
El San Juan más multitudinario fue también el más tranquilo. El Ayuntamiento cifra en 160.000 las personas que se acercaron a los arenales y al Paseo Marítimo. Pese a batir récord de público, la noche meiga se cerró sin incidentes graves. Incluso se redujo el número de atenciones de los servicios de emergencias en un 33% con respecto a 2011. También se respetó la prohibición del baño: la Policía Local y Protección Civil solo se vieron obligados a sacar del agua a cinco personas, una de ellas una mujer de 72 años que se bañaba desnuda de madrugada en Riazor.
Por las playas se pasaron 160.000 personas, aunque las atenciones de emergencias se redujeron un 33% con respecto a 2011
Cruz Roja contabilizó 135 intervenciones –el año pasado se registraron 182–, y el Ayuntamiento habla de 122 personas atendidas, de las cuales 31 tuvieron que ser trasladadas a centros sanitarios –un 53% menos que en 2011–. Según Cruz Roja, 43 personas sufrieron quemaduras y 31 necesitaron atenciones por heridas leves producidas por cortes. Hubo 25 casos de intoxicaciones etílicas. La principal incidencia, según Cruz Roja, fue una herida por arma blanca, que recibió un joven de 20 años, aunque según los servicios de emergencia su estado “no era extremadamente grave”. Tuvo que ser trasladado al Hospital Universitario.
El otro susto de la jornada se produjo ya ayer por la tarde. Los agentes recibieron una alerta de un joven desaparecido en la playa del Matadero. Fue una falsa alarma: el joven seguía de fiesta, y llegó a su casa a última hora.
Los bomberos también tuvieron menos trabajo que en otras ocasiones. Solo obligaron a rebajar varias de las hogueras que inspeccionaron en las playas y en los barrios, y tuvieron que intervenir en media docena de incendios de contenedores.
limpieza
El de este fin de semana fue el San Juan más multitudinario, pero también en el que más basura se acumuló en los arenales. Por Riazor y el Orzán parecía que había pasado un tornado a primera hora. En total, los operarios de Cespa recogieron 180 toneladas de basura, un 2,2% más que el año pasado.
El dispositivo de limpieza empezó una hora más tarde lo previsto, a las siete de la mañana, debido a la afluencia de gente en las playas. Los 110 operarios y las 45 máquinas arrancaron las tareas de recogida de basura por las playas de Riazor –donde urgía tener el arenal a punto para los juegos infantiles de las doce de la mañana– y Oza.
Como novedad, este año se mantuvo cerrado el Paseo Marítimo hasta cerca de las once de la mañana para facilitar las tareas de limpieza. Los operarios emplearon 14 horas para despejar de basura Riazor, Orzán, Oza, Matadero y As Lapas. El baño en el Orzán no se abrió hasta las cinco de la tarde. n
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