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jueves | 25 abril | 2024
Antonio Pereiro es un vecino de A Coruña de 67 años, que vive desde hace 40 años en el Lugar Canteira de Eirís. Marinero y jardinero de profesión, Pereiro sufre desde hace varios meses una situación de desamparo porque la casa en la que vive de alquiler quedó en ruinas después de que se demoliese \“de forma irregular parte do inmoble\”. El grupo municipal del BNG denunció ayer la situación que sufre el coruñés, que dado el estado de la vivienda tiene que marcharse en una semana, y exigió al Ayuntamiento una solución. Por su parte, fuentes municipales aseguran que Servicios Sociales ya trabaja en las posibles alternativas para el vecino.
El concejal del BNG Xan Caxigal, acompañado de Antonio Pereiro, denunció ayer la situación del vecino a la que \“o goberno local eludiu buscar unha solución\”. El estado ruinoso de la vivienda que ocupa Pereiro le obligará a dejar su casa en siete días sin tener, de momento, otro lugar donde vivir. Según el BNG este problema es consecuencia \“do desenvolvemento urbanístico da Canteira de Eirís\” porque \“de xeito irregular, recoñecido polos servizos municipais, demoleuse parte do inmoble no que vive de alugueiro Antonio\”.
La empresa responsable fue sancionada y obligada a reparar los daños pero todavía no se han afrontado las reformas y eso obliga al desalojo del vecino. \“Como resultado da demolición parcial Antonio está a vivir nos últimos meses unha situación deplorable, de dramático abandono, ao ter que residir nunha casa que non reúne as mínimas condicións de habitabilidade e mesmo correndo risco físico\”, recalcó Caxigal.
El edil afirmó que ya habían puesto en conocimiento del Ayuntamiento el caso hace algunos meses y reclaman que ofrezcan una solución a Pereiro, que supuestamente \“desapareceu da lista de solicitantes e da de adxudicatarios de vivendas sociais\”.
El afectado aseguró que nadie del gobierno se interesó por su caso, si bien fuentes municipales afirman que desde Servicios Sociales \“se le está orientando y buscando salidas a su situación\”. Aún así todavía no hay una solución concreta sobre la mesa.
