Toda la comarca vuelve a rendirse al rugido de los clásicos de la Ciudad de Cristal

Toda la comarca vuelve  a rendirse al rugido  de los clásicos  de la Ciudad de Cristal

Ni por todo el oro del mundo venderían su coche, uno de esos  bólidos con los que recorren el área metropolitana, desde Santa Margarita hasta Cecebre. 
La Concentración de Clásicos Ciudad de Cristal, organizada por el Automóvil Club de Galicia, convierte las carreteras coruñesas en una exposición donde los internacionales Cadillac de los 40 y 50 comparten paseo con los Seat 600, 1400 B, incluso con el mítico 850 Spider.  
Si solos, o con sus  orgullosos conductores, consiguen llamar la atención en cualquier vía, más aún cuando se reúnen como en Santa Margarita, antes de partir hacia Cecebre para compartir mesa, mantel y combustible, después de pasar por Acea de Ama, donde “pararon las máquinas” para realizar una visita guiada a uno los molinos y compartir un tentempié; por Peiraio de Cambre, donde también subieron a la aceña, una de los más emblemáticos de As Mariñas. 
El Pantano de Cecebre es el escenario escogido para,  después de la comida, entregar los recuerdos y reconocimientos a los más destacados de la concentración que, cada año a las puertas de la temporada estival, deja con la boca abierta a cientos de vecinos del área de A Coruña.

Toda la comarca vuelve a rendirse al rugido de los clásicos de la Ciudad de Cristal

Te puede interesar