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sábado | 20 abril | 2024
El Instituto de Estudios Coruñeses José Cornide estrena nuevo director con vocación de aperturismo a la sociedad. La elección de Tino Fraga, antiguo director de los Museos Científicos, como cabeza visible de la institución tras la decisión de marcharse de Andrés Fernández-Albalat supondrá un mayor trabajo para divulgar la dedicación de la entidad e incrementar el ofrecimiento de colaboración con el Ayuntamiento en temas de actualidad.
Muy agradecidos a los 16 años dedicados por Fernández-Albalat y satisfechos por la consecución de este de una estabilidad jurídica para el José Cornide, la nueva junta mostró ayer algunas de sus cartas para esta nueva etapa que se prolongará, de momento, tres años. Existe el acuerdo de darle un cargo honorífico al ya exdirector, pero las grandes líneas del nuevo mandato seguirán varios caminos con el mismo objetivo de “reconectar coa sociedade”.
“Continuaremos na labor realizada nestes anos pero, resolto o tema xurídico, penso avanzar nunha nova fase para dinamizar o instituto coa sociedade”, avanzó el nuevo director, Tino Fraga.
Con la adaptación lógica a la sociedad actual, la idea es que la institución “volva a ser unha ferramenta ao servicio da sociedade”, algo a lo que contribuirá “o enorme potencial dos ilustres numerarios”.
Actualmente 13 profesionales forman parte de este cuerpo. A ellos se sumarán en 2017 la directora del Archivo Municipal, María de la O Suárez; la historiadora y directora del IES Monte das Moas, Ana Romero; el arquitecto Manuel Gallego Jorreto; y el ingeniero de Caminos, Canales y Puertos Carlos Nardiz. Así alcanzarán los 17 numerarios que, a su vez, abarcarán las más diversas disciplinas.
Justo por eso Fraga insistió en que el Instituto es el lugar adecuado al que puede remitirse la Administración local como si fuera un órgano consultivo. Así se ofreció a realizar estudios que no tendrían por qué tener carácter vinculante pero que podrían versar sobre temas de actualidad como “o modelo de cidade, o tema do botellón, o futuro urbanístico, os vidros franquistas...”.
En este interés por difundir el conocimiento –se recuperará la revista que se publicaba hasta hace cinco años– y servir de apoyo al Ayuntamiento insistió Fernández-Albalat, que destacó con jocosidad su resistencia en la dirección.
