“Tenemos que adelantarnos y prever las necesidades de las empresas”

“Tenemos que adelantarnos  y prever las necesidades de las empresas”
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Luisa Cid aplaude los buenos datos del comercio y augura un 2015 con mayor recuperación.

Según los últimos datos, 2014 fue un buen año para el comercio coruñés ¿Está satisfecha?
Estamos en proceso de recuperación, así que la satisfacción hay que guardarla para cuando realmente hayamos superado el bache. Cuando se habla de grandes cifras económicas, inmediatamente todos pensamos en gente que está a nuestro alrededor y que lo sigue pasando mal, pero cada vez son más los indicadores. Ya no es macroeconomía. A nuestro alrededor vemos signos que nos indican que ya estamos en otra cadencia.

¿Hablamos, por tanto, de brotes verdes?
Es bueno ser un poco analítico. Nos quedamos con ideas muy complejas que queremos reducir a un titular. No siempre es fácil. Pero sí que es verdad que todos los indicadores nos dicen que todo va mejorando. No tenemos que fijarnos solo en qué número de empresas nuevas se crean, porque hay mucha rotación, pero sí se están produciendo cambios.

¿Como cuáles?
Las empresas de toda la vida están viendo que, sin haber recuperado todo su margen de negocio anterior, sí que están un poco más desahogadas. Y entre los proyectos nuevos, algunos han conseguido hacerse sólidos en los últimos años. Y están surgiendo proyectos muy interesantes, y se ve a nivel de calle y también con los números. Hay mucha gente que está desarrollando nuevos proyectos porque en su marco de actuación de antes se acabó su trayectoria y tuvieron que buscar otra salida.

Esto es esperanzador.
Sí, pero no significa, ni muchísimo menos, que haya que relajarse nada, porque precisamente si el ciclo está en un momento de cambio en que está llegando a las bases, es cuando uno tiene que posicionarse muy bien para coger la ola. Ahí es muy importante trabajar en el tema de cultura empresarial. El comerciante es un empresario y esta labor de profesionalización del comerciante como tal es una parte importante del trabajo.

¿Cómo se plasma a pie de calle?
Esto se observa en el tema de los cruceristas. Siempre se habla de que no dejan el suficiente dinero en la ciudad, pero eso pasa en todas. Lo que pasa es que en A Coruña se ha producido un desajuste muy grande, porque en 2009 venían 50.000 cruceristas y en los últimos años estamos en una horquilla entre 165.000 y 180.000. Eso supone que hay que hacer un reajuste. Esta evolución se está produciendo y es muy positivo.

¿Y es extrapolable a otros sectores?
Sí, de hecho estamos trabajando ahora con los congresistas. Que es gente con un alto poder adquisitivo, que vienen y se quedan tres o cuatro días. Pues nuestro comercio tiene que estar ojo avizor con todas estas oportunidades empresariales y saber adaptarse a esos clientes nuevos.
¿Es, por tanto, vital trabajar en este aspecto?
No podemos olvidar que comercio, hostelería y turismo son un veintitantos por ciento de la economía local. Esta parte de formación en estos sectores es muy importante. Y aunque es más difícil de ver, lo cierto es que llevamos trabajando mucho en los últimos años.

¿Y sobre los nuevos emprendedores?
Hay ideas interesantísimas que están surgiendo y donde ves que en A Coruña hay mimbres para hacer cosas fantásticas. Esta es una ciudad económicamente muy activa y muy atractiva y hay ideas francamente potentes.

¿Cuáles son sus objetivos al frente de la concejalía para este año 2015?
El principal siempre tiene que ser el desempleo. Es cierto que hemos ido mejorando bastante, y estamos en un 16% que, aunque es el menor de Galicia, es claramente insuficiente. Una ciudad como la nuestra, que según el informe Ardán concentra el 40% de la economía de Galicia, no puede tener un 16% de paro. La administración tiene que facilitar las cosas y saber por qué apuesta. Si siempre, cada céntimo de dinero público es sagrado, ahora mucho más.  

¿Cómo se puede potenciar el empleo?
Por ejemplo, prestando atención al trabajo a través de convenios con las empresas, que nos dan muchas pistas de cómo está la situación y, sobre todo, de lo que va a venir.

¿Y qué se nos avecina?
Estamos muy atentos al Puerto Exterior. Los puertos del norte de Europa están saturados. Punta Langosteira es, por todo, un punto focal de crecimiento. Nosotros, por ejemplo, que podemos saber con uno o dos años de antelación qué empresas tienen pensado implantarse, es importante que estemos encima previendo qué tipo de perfiles van a necesitar, para que cuando llegue el momento no tengan que irse fuer a buscarlos. Los resultados a medio y largo plazo son muy importantes. Y acertar con este tipo de cosas es vital. A lo mejor unos estibadores o unos soldadores que van a hacer falta en el Puerto Exterior los tengo que formar hoy.

¿Y eso se está haciendo ya?
Sí, claro.

¿Qué expectativas tiene con la puesta en marcha del vivero de empresas del Papagayo
Todas, porque es un vivero especial. A diferencia del de A Grela, que se basa en el arrendamiento de suelo barato para implantar empresas que están empezando, este es otra historia. Es un centro de innovación empresarial donde se trata de poner a disposición de emprendedores innovadores los medios para nacer y crecer. Tienen que ser proyectos que tengan una capacidad de crear y crecer. El roce entre unos proyectos y otros y distintos sectores es lo que aporta valor a estas ideas innovadoras y capacidad de crecimiento; ese socio que puedes necesitar el año que viene.

“Tenemos que adelantarnos y prever las necesidades de las empresas”

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