Un taxi sin conductor se estrella en la avenida del Ejército y provoca un embotellamiento

La Policía Local registró a las siete de la tarde de ayer un curioso accidente: un taxi sin nadie al volante rodó por la avenida del Ejército en dirección entrada hasta estrellarse contra la mediana de cemento, donde quedó montado. No fue posible retirarlo hasta una hora después, por lo que se produjeron retenciones, y la Policía Local tuvo que desviar el tráfico.
Los primeros informes apuntan a que el taxista se había detenido en la gasolinera que se encuentra en As Moas para preguntar una dirección, sin darse cuenta de que había abandonado el vehículo sin poner el freno de mano. Silenciosamente, el vehículo comenzó a desplazarse cuesta abajo y para cuando el taxista se dio cuenta, ya era demasiado tarde.
Los testigos aseguran que salió de la estación de servicio gritando “¡El coche! ¡El coche!” y tratando de darle alcance corriendo detrás de él por la calzada. No lo consiguió: de hecho, se cayó durante la persecución, aunque sin sufrir heridas de consideración.
Impertérrito, el taxi siguió su trayectoria hasta encontrarse con la mediana de cemento, donde quedó montado, sin producir más daños que en algunas plantas ornamentales.

atasco
La Policía Local acudió al lugar de los hechos y, en un primer momento, se limitó a cortar el carril izquierdo en dirección entrada, lo que provocó embotellamiento. Durante casi una hora, esperaron a que la grúa retirara el vehículo, pero fue imposible. Parecía encajado.
Finalmente, se cortó la avenida para que actuaran dos grúas y entre las dos, pudieron retirar el taxi.