La subida del IBI pone en peligro la continuidad de la actividad de Palexco

La subida del IBI por parte del Gobierno local ha afectado de modo especial a Palexco, que este año deberá abonar 527.000 euros, un 117% más que en el ejercicio anterior. Un incremento, que, alerta el concesionario, pone en serio peligro la continuidad del recinto.
La ubicación del complejo denominado como Alas de Gaviota –formado por Palexco y Los Cantones Village– en terrenos de la Autoridad Portuaria es el argumento utilizado desde el Ayuntamiento para subir el gravamen. El pasado octubre, el equipo de Xulio Ferreirro inició la modificación de las ordenanzas fiscales, subiendo el tipo tributario de las instalaciones portuarias del 0,7 al 1,3%. A pesar de que la actividad de Palexco no tiene que ver con las que habitualmente se desarrollan en las instalaciones portuarias, el Gobierno local decidió aplicarle la misma tasa que al resto.
El concesionario advirtió entonces al Consistorio de que una subida del 117% en la cuota del IBI haría inviable la actividad y obligaría a devolver la concesión a la Autoridad Portuaria, pero desde María Pita desestimaron este razonamiento y decidieron gravar el IBI con una cuota de 527.000 euros al año. A esta cantidad se suman los 350.000 euros del canon por la concesión que la empresa abona a la Autoridad Portuaria. “No hay actividad que soporte unos impuestos directos tan altos en el puerto de A Coruña; la actividad es insostenible”, advierten desde la concesionaria.
Esta ha tratado de evitar la subida del impuesto apuntando la consideración de Palexco como actividad de interés municipal –que quedaría fuera de la subida fiscal establecida para este año–, pero hasta el momento el Ayuntamiento no ha reconocido esta característica.
La situación económica general, unida a este incremento del IBI pueden tener consecuencias fatales para Palexco: “El año pasado las pérdidas fueron de 600.000 euros y nuestra previsión para este año, con la subida del IBI, es que alcancen los 950.000”. “La continuidad del complejo en estas condiciones impositivas tan desproporcionadas es imposible”, auguran desde la concesionaria, que denuncia una “sensación de completo desamparo”. “No entendemos cómo se nos ha incluido en una subida que al parecer estaba pensada para las actividades típicamente portuarias”.