Sorprendida una banda cuando asaltaba una vivienda de Eirís

Una banda compuesta por dos hombres y una mujer fue arrestada el martes de la semana pasada tras ser sorprendidos in fraganti en el interior de un chalé en camino de A Regueira, una vía situada entre la carretera de Eirís y la avenida de A Pasaxe. Eran una mujer de 41 años y dos jóvenes que no se dieron cuenta de la presencia policial hasta que se los encontraron en el pasillo de la casa. Tanto uno de ellos, de 22 años, como la sospechosa, cuentan con varias detenciones anteriores en su haber así como  una orden de búsqueda y detención decretada por dos juzgados diferentes de la ciudad. El tercero nunca había sido detenido antes.
Nadie reside en la vivienda asaltada, por eso el trío la escogió como objetivo, pero al entrar cometieron un error e hicieron saltar una alarma que alertó a las autoridades. Eran las cinco y media de la madrugada cuando acudió el primer coche patrulla y se encontró en el lugar con una mujer que manifestó ser familiar de los propietarios. Les dijo a los agentes que ella era la persona que estaba a cargo de la casa y que acaba de comprobar que tenía las luces encendidas y el garaje entreabierto. 
Los agentes entraron a inspeccionar en el inmueble y lo primero que observaron fue que las verjas que protegían la ventana de la cocina forzadas. Además, la alarma estaba fracturada y arrancada de su lugar, y varias  estancias revueltas.
Los policías oyeron ruidos en la primera planta. Subieron sigilosamente y sorprendieron a dos personas, hombre y mujer, saliendo de una de las habitaciones que se quedaron “perplejos” al verles. Mientras les detenían, otros policías revisaron el lugar y descubrieron a un tercer sospechoso tratando de esconderse tras unos setos.  Otras dotaciones policiales continuaron revisando el resto de la casa. Localizaron en el exterior a otro joven, agachado, tratando de esconderse detrás de unos setos. 

maquinaria
En la inspección también encontraron varios objetos apilados junto a la puerta de acceso a la finca. Se trataba de diversa maquinaría de jardinería y varios efectos metidos en cajas, listos para llevárselos. 
Además la encargada dijo que le faltaba, del interior de una de las habitaciones, dinero en efectivo. Los agentes comprobaron que los asaltantes llevaban unos ciento treinta euros, por lo que decidieron incautarles dicha cantidad de dinero. n