La salida del ascensor del párking de O Parrote será un 60% más pequeña

Poco más que un visto y no visto ha sido lo que ha durado la estructura metálica sobre la que se asentaría la salida del ascensor del párking de O Parrote. Apenas una semana después de que los vecinos de la zona manifestasen su malestar por las dimensiones de la construcción, esta acababa desmontada. Fue ayer cuando un equipo de operarios procedió a retirar las vigas de metal de un armazón que se ha replanteado para reducir su tamaño en un sesenta por ciento.
El alcalde, Carlos Negreira, fue en encargado de anunciar, unas horas antes de que comenzase el desmontaje, que el Ayuntamiento había llegado a un acuerdo con la empresa adjudicataria de la obra del párking, Copasa, para que la salida del ascensor resulte menos llamativa. Esa era la petición que desde el gobierno municipal se había hecho la semana pasada a la empresa; esta, por su parte, se había comprometido a estudiar la viabilidad del cambio. Finalmente, según indicó el regidor, la nueva estructura ideada por Copasa supondrá una reducción notable de las dimensiones de la original.

acorde
Las protestas de los vecinos apuntaban que la salida del ascensor articulada sobre la superficie del párking contradecía los principios del proyecto aprobado en enero de 2012, al superar la cota de O Parrote y, por tanto, obstaculizar las vistas de los muelles. La futura construcción, aseguró Negreira, estará en consonancia con el entorno, de la misma forma que el edificio para usos comerciales sobre cuyo techo se levantará. De acuerdo con la licencia que concedió el Ayuntamiento, este edificio consistirá en una estructura de vidrio y acero, “acorde” con su alrededor que ocupará una superficie de mil metros cuadrados.
El alcalde reiteró que las obras del aparcamiento estarán finalizadas en la fecha prevista, el próximo 25 de junio. Será entonces cuando entre en funcionamiento, con un acceso provisional desde Puerta Real –después será desde el túnel de La Marina– y otro definitivo desde el castillo de San Antón. También se podrá estrenar para entonces la plaza, con la que se recuperan para el uso de los coruñeses 20.000 metros cuadrados al lado del mar.