El rural exige saneamiento y servicios en los presupuestos participativos

Las áreas rurales de A Coruña serán unas de las grandes protagonistas de los presupuestos participativos a ejecutar el año que viene si su autoreivindicación ha sido apoyada, pues se han pedido servicios tan básicos como conseguir redes de saneamiento o que se arreglen los caminos que los conectan con otras zonas. Además, dentro de las posibles medidas que la ciudadanía estuvo votando hasta la noche del lunes hay peticiones de lo más variopintas tales como instalar paneles solares sobre los nichos. 
La página web A porta aberta, que canaliza las convocatorias de presupuestos participativos del Ayuntamiento, cerró en la noche del lunes al martes la votación final de las ideas propuestas por los vecinos. Ayer la plataforma comunicaba que “nos próximos días estarán dispoñibles, para a súa consulta, as propostas que resultaron gañadoras ata sumar os 3.000.000 de euros dispoñibles”. 
El número de apoyos no es visible en esta fase, ni siquiera a pesar de que ha cambiado el sistema de reparto de los fondos, por lo que será el Gobierno local el que anuncie en unos días aquellos proyectos que se incluirán en su previsión de gasto para 2018 (curiosamente con el 66% de las acciones comprometidas los dos años anteriores sin completarse). 
Pero un gran número de las demandas tanto a nivel de ciudad como de barrios están relacionadas con el carril bici, que está en plena ejecución en zonas como Monelos, o la instalación de estaciones de BiciCoruña. 
No obstante, este año las áreas rurales de la ciudad han levantado la voz metafóricamente para reclamar muchos servicios de los que todavía carecen a pesar de que son vistos como algo normal en el resto del ayuntamiento. Por ejemplo, los técnicos municipales calcularon en 800.000 euros la inversión necesaria para instalar el alcantarillado a 13 viviendas ubicadas en Foxo, en la zona del colegio Maristas. También en Cances y en A Silva piden ese tipo de saneamiento, así como el asfaltado de las aceras y que se arreglen los caminos antiguos. 

Movilidad en la periferia
En puntos cercanos a Penamoa consideran que, una vez eliminados los focos de venta de droga, deberían recuperarse los caminos para el disfrute de los vecinos. El presupuesto estimado sería de 65.520 euros. Los vecinos de Feáns, por su parte, reivindicaron el arreglo del camino hacia Castro de Elviña, que rozaría los 42.000 euros de inversión.
Frente a las demandas más normales, también se han dado otras peticiones llamativas que han pasado el filtro del Gobierno local. Estas son tales como instalar paneles solares en los cementerios o aprovechar un solar abandonado en la Barrera para plantar un jardín vertical. Además, llama la atención el interés por zonas de estudio al aire libre o el que se haya aceptado someter a la decisión popular la instalación de un rocódromo que costaría casi 200.000 euros en Bens. l