Roberto Rivas: "Me llena de orgullo que mis compañeros no desahucien"

El bombero sancionado tras negarse a desahuciar a una octogenaria en A Coruña, Roberto Rivas, que se ha encadenado hoy a un tejado para frenar un desalojo, ha afirmado que siente la "alegría y el orgullo" de que sus compañeros refrendaran su postura de que desahuciar no es un "trabajo" para ellos.
Los bomberos de A Coruña se han negado a desalojar una vivienda del barrio coruñés de Elviña, donde esta mañana se ha iniciado el derribo de las partes anexas a la casa y pronto continuará en la vivienda donde permanecieron encerradas seis personas hasta las 13.20 horas.
Uno de los que se encadenó al tejado fue Roberto Rivas, que ha llamado la atención ante los medios de comunicación sobre el "despliegue" con el que "parecía que iban a invadir A Coruña y no a echar una familia de su casa", pues había en torno a un centenar de agentes del orden.
"Lo que pretendíamos era aguantar lo máximo posible para que no se llevara a cabo el desahucio. Entendemos que la familia lleva una carga emocional inmensa. Con esta violencia tan brutal que sucedió en la vivienda fue Álvaro quien decidió, con buen criterio, bajar pacíficamente", ha señalado.
Tras enterarse de que sus compañeros del Parque de Bomberos se negaron a acudir y que fue necesario alquilar una grúa para que los agentes subiesen al tejado, Rivas se ha mostrado muy satisfecho.
"Algo que me llena de alegría y orgullo es que mis compañeros, no solo en A Coruña sino en todo el país, argumenten lo que decimos desde un principio, que este trabajo no lo tienen que hacer los bomberos", ha agregado.
Supone que lo sancionarán por esta actuación, como le sucedió en el caso de la octogenaria Aurelia Rey por el que le fue impuesta una multa de seiscientos euros, porque sabe que está "incumpliendo leyes".
"Una ley -ha continuado- que permite echar a una familia de su vivienda, pero no permite luchar pacíficamente para que no se haga", una opinión que sustenta su creencia "en la desobediencia civil en un momento como el que vive ahora la sociedad".
Sobre la situación del desalojado, Álvaro Corral, y su familia, ha sostenido que "no la debería vivir nadie" y ha opinado que "si realmente existe el terrorismo en este país es el institucional, es salvaje y brutal".