Reportaje | Una oportunidad tan única como llena de posibilidades

El futuro de la fachada marítima representa una oportunidad tan inigualable como llena de posibilidades para la ciudad y cuyos aspectos están por definir casi en su totalidad.
El mes pasado la Xunta, el Ministerio de Fomento, Puertos del Estado y la Autoridad Portuaria firmaron un acuerdo que garantiza la titularidad pública de los muelles de Batería y Calvo Sotelo y de La Solana, quedando pendiente el muelle de San Diego para cuando acabe su concesión.
Este es un paso para definir el porvenir del borde litoral, pero todavía faltan por definir aspectos como los usos que acogerán, el modelo de gestión que se aplicará o el papel que deben desempeñar los ciudadanos en ello.

Partiendo de esta base, representantes de diversos sectores de la ciudad como la pesca, la arquitectura, el medio ambiente, el comercio o los promotores muestran sus visiones, entre las que predomina la prudencia a la hora de expresarse para no caer en posibles malentendidos o críticas.
Aunque hay algunos puntos sobre los que existe cierta coincidencia, como la necesidad de abrir estos espacios a la ciudadanía, las opiniones que aportan estas personas son tan diversas como los sectores a los que representan, una variedad que debería contribuir a enriquecer el debate sobre el futuro de estos terrenos pegados al mar.

Un punto sobre el que hay bastante unanimidad es que las decisiones que se tomen deben ser de manera conjunta entre las administraciones implicadas en el proceso, además de tener en cuenta también a los coruñeses y las aportaciones que puedan realizar técnicos o expertos.
La parte complicada será encontrar el punto de acuerdo entre las numerosas propuestas que se realizan, aunque lo que se puede adivinar es que puede haber muchos que no quedarán contentos con la solución que se tome en última instancia.

Los plazos para la desafección de estos terrenos también suscitan bastantes dudas y son considerados como un elemento fundamental de cara a definir los futuros usos y son varias las voces que optan por la prudencia e ir poco a poco ya que entienden que es un proceso bastante largo y complejo.