Reportaje | Manuel Marsol repasa su carrera en la escuela Pablo Picasso

El ilustrador Manuel Marsol (Madrid, 1984), primer español premiado en la Feria Internacional del Libro Ilustrado de Bolonia, pisó ayer por primera vez la Escola de Arte e Superior de Deseño (EASD) Pablo Picasso para conversar con un centenar de alumnos sobre su trayectoria profesional.
En la sesión, Marsol charló con la profesora de proyectos de Ilustración Clara López sobre los álbumes ilustrados que ha realizado en su carrera y con los que ha ido aprendiendo. “Intento poner en situación a la gente de que una cosa es el trabajo creativo y otra distinta es que reporte lo que esperas. No se trata de vender una idea negativa, pero el álbum ilustrado es un formato complicado que no siempre tiene salida como lo harían otros trabajos”, apunta el autor, quien considera sus álbumes “el lugar perfecto para desarrollar la creatividad”.
Asegura que hay muchísimas maneras de dedicarse a la ilustración pero, si ha de escoger, se queda con el formato que abandera. “Los álbumes ilustrados son más personales, están alejados de lo comercial. No suelo aceptar encargos y siempre trabajo para mí, salvo algunos proyectos que escribo junto a mi pareja, Carmen Chica”, indica el ilustrador, que pretende lanzarse ahora al mercado extranjero, principalmente al francés.
Desde la escuela Pablo Picasso, su director, Mario G. Herradón, afirma que Manuel Marsol “es un referente de ámbito internacional para la ilustración contemporánea” y enumera, entre otras distinciones que ha recibido, el premio del V catálogo iberoamericano de Ilustración y el premio nacional Amadora BD de Portugal al mejor ilustrador de álbum extranjero. 
Sobre la Feria del Libro Ilustrado de Bolonia, el autor indica que es una cita imprescindible con más de 50 años de trayectoria y reconoce estar orgulloso de haber sido reconocido por la organización. “Desde hace nueve años otorgan un premio al mejor ilustrador menor de 35 años y es todo un honor que me seleccionen de entre 3.000 que se presentan cada año, de los que luego solo quedan 70 y, finalmente, el ganador”, apunta el dibujante, que hará en marzo una exposición en la ciudad italiana sobre su obra ganadora y está a punto de publicar ese álbum en la editorial SM.
El artista madrileño no para y ya anda pergeñando varios proyectos junto a Javier Sáez Castán, Premio Nacional de Ilustración en 2016, entre ellos uno titulado “Museo”. “Él es un referente para mí, trabajar con él es un sueño”, cierra Marsol. l