La recaudación por la tramitación de licencias cae un 46% entre 2014 y 2016

Las quejas emitidas desde varios sectores de la ciudad por el descenso en el número de licencias concedidas por el Gobierno municipal comienzan a confirmarse con cifras. Así, el Ayuntamiento pasó de ingresar 3.663.000 euros en 2014, último año completo de mandato del Partido Popular, a 1.987.000 euros el año pasado, el primer ejercicio total de la Marea, una diferencia que se va hasta el 46%.

En cuanto a cantidad total, la bajada más grande se produjo en el dinero ingresado por las arcas municipales a través del Impuesto sobre Construcción, Instalaciones y Obras (ICIO), que supone el 3% del presupuesto de ejecución del proyecto de obra presentado para obtener licencia.

La caja de María Pita ingresó en 2014 hasta 2.570.000 euros por el ICIO todavía con el Partido Popular, mientras que las cifras de la Cuenta General del año pasado hablan de solo 1.400.000 euros, una reducción del 46%.

Otro descenso de gran relevancia fue el que se produjo por los ingresos procedentes de la concesión de licencias urbanísticas. Si en 2014 el Ayuntamiento ingresó 645.000 euros, en 2016 esta cifra bajó hasta 400.000 euros, un 38%.

Sin embargo, el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras y las licencias urbanísticas no son los únicos tributos que descendieron entre el último año completo de mandato de los populares y el primero del actual Gobierno local.

más casos
Así, las licencias de apertura y las de primera ocupación también registraron importantes caídas. En el caso de las licencias de primera ocupación, aquellas que se necesitan para entrar a vivir en una vivienda finalizada, el descenso fue el más acusado de todos, con hasta un 77% de diferencia entre ambos ejercicios. El Gobierno popular recaudó 206.000 euros, mientras que la Marea Atlántica ingresó 47.000 euros por este concepto. Finalmente está el caso de las licencias de apertura, que son necesarias a la hora de poner en marcha un negocio. La bajada en este caso fue de 102.000 euros, desde 242.000 hasta 140.000 euros, una reducción del 42% entre ambos años.

Estos datos reflejan las quejas que se vienen produciendo desde hace meses y que reflejan el sentir de diversos sectores de la población como comunidades de propietarios, que se encuentran con problemas a la hora de realizar obras en sus viviendas, los grupos de la oposición, que denuncian la “parálisis” en la que se encuentra la ciudad bajo el control del actual equipo de gobierno, y colectivos profesionales como los constructores y promotores, que se encuentran con muchas trabas a la hora de intentar sacar adelante sus iniciativas dados los problemas que se les plantean desde el Ayuntamiento para la obtención de licencias o permisos.

Además, la iniciativa particular también se ve perjudicada por esta situación ya que consideran que el Gobierno local plantea muchos problemas a la hora de intentar abrir un negocio.