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miércoles | 24 abril | 2024
El voto particular presentado por el PSOE, y que contó con el apoyo del Partido Popular, propició que no se produzca en 2017 el incremento en el recibo del agua que proponía la Marea, que respondió eliminando del orden del día el resto de ordenanzas fiscales para evitar que ambas formaciones pudiesen aprobar una bajada del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), tal y como planteaba la formación encabezada por José Manuel Dapena.
Las dificultades del equipo liderado por el alcalde Xulio Ferreiro para sacar adelante los asuntos en el pleno quedaron ayer de nuevo patentes al ver cómo el voto particular presentado por el Partido Socialista echaba por tierra la subida de 50 céntimos al mes en el recibo del agua para compensar el incremento en la tasa de depuración.
Los socialistas ya habían anunciado que no estaban de acuerdo con la propuesta de la Marea y basaron su argumentario en que no estaba justificada, ya que en ningún momento se explicó a qué se iban a destinar los 1,6 millones de euros extra que ingresaría la Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar) Bens con el aumento.
La concejala de Medio Ambiente, María García, aseguró que iban a decepcionar a los ayuntamientos de Arteixo, Oleiros, Cambre y Culleredo, que también forman parte del Consejo de Administración de la EDAR, ya que en este órgano ya había sido aprobado el incremento.
De esta manera, la Marea se quedó solo con el apoyo del Bloque Nacionalista Galego en su intento de incrementar el recibo del agua del año que viene, ya que el PP optó por unirse a la propuesta planteada por los socialistas.
La portavoz popular, Rosa Gallego, acusó al Gobierno local de querer que sean los coruñeses los que paguen el aumento pactado para la tasa de depuración, algo que rechazó rotundamente. Dejó una puerta abierta a un posible apoyo a la subida, pero que solamente se produciría a cambio de la bajada del 10% que piden desde hace meses en el IBI. De hecho, los populares presentaron una enmienda en estos términos, pero fue rechazada.
Xulio Ferreiro, una vez que vio cómo PP y PSOE tumbaban su propuesta para el agua, sorprendió anunciando que retiraba del orden del día el segundo asunto, en el que estaban el resto de ordenanzas fiscales, incluido el IBI, ante el que el Partido Socialista también iba a presentar un voto particular.
El PSOE proponía un descenso del 5% del IBI y el PP defiende desde hace tiempo uno del 10%, pero el temor del Gobierno municipal a que los populares apoyasen la propuesta socialista llevó al alcalde a tomar esa decisión.
nueva vía
El socialista José Manuel García aprovechó su turno de palabra perteneciente a otros asuntos para insistir en el punto retirado, sobre el que recordó que el PSOE apoyaba las diez modificaciones de ordenanzas presentadas por la Marea, a quien afeó que no diesen su apoyo en la única propuesta socialista, la de reducir el IBI.
Ante el panorama creado, el concejal del PSOE planteó una opción que se abre después del fuerte desencuentro de ayer. “Nos va a obligar a pedir otro pleno porque con seis concejales no nos llega para traer lo que nos hurta de debatir”, aseguró el edil. De esta manera puso sobre la mesa la posibilidad de que soliciten la celebración de un pleno extraordinario, aunque es el último recurso si las negociaciones no fructifican.
Rosa Gallego también hizo referencia a la retirada del punto, y dijo que esperaba que fuese con el objetivo de que se pueda negociar la reducción del IBI.
