El precio del marisco y el pescado se reduce en Fin de Año con respecto a Nochebuena

Los coruñeses despedirán el año degustando los mejores productos de mar, pero en esta ocasión a un precio más reducido en comparación con la Nochebuena y Navidad. La calma en el mar ha traído a la ciudad la estabilidad en los mercados, donde, si hace una semana el kilo de percebes llegó a alcanzar los 400 euros, ahora no supera los cien. Los placeros incidieron ayer en la caída de los precios en relación a hace siete días para reanimar las ventas.

En la plaza de Lugo, pese a ser lunes, los puestos estaban abiertos al público que buscaba a última hora los ingredientes para su última cena del año. Las grandes colas llenaban el mercado, donde se podía encontrar marisco más económico. Así, la centolla estaba ayer a 45 euros el kilo; las cigalas entre sesenta y noventa; la nécora a setenta; y los bogavantes a setenta euros. Como marisco más caro destacaba ayer el camarón, con un precio que oscilaba entre los ochenta y los 180 euros el kilo. El santiaguiño, a 140; y el percebe a un precio máximo de cien euros. En cuanto al pescado, los precios también descendieron en relación con la pasada semana. Así, el besugo se podía comprar a un coste de 55 euros (quince menos que hace una semana); el rodaballo a 44; el lenguado a 39; y el rape a 30. La merluza, otro de los pescados más consumidos en estas fechas, alcanzó ayer los 35 euros el kilo, el mismo valor que la lubina. Pero no todo el menú de Fin de Año es producto de mar. La carne, sobre todo el cordero y el solomillo de ternera, son los más demandados. El lechón costaba doce euros el kilo; la pularda, 10,50; y el solomillo, 29.

Pero el producto que no faltará esta noche en ninguna vivienda de A Coruña es la uva. Con pepita o sin pepita, esa es la principal diferencia de esta tradicional fruta. En la plaza de Lugo el precio de la uva sin pepita alcanzaba ayer los 5,95 euros, mientras las normales costaban 3,95.