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jueves | 25 abril | 2024
abel peña > a coruña
Por primera vez en toda su historia, la Policía Local y los bomberos contarán con un reglamento interno que paute su funcionamiento. Las mesas técnicas para ambos cuerpos, compuestas por el director de Seguridad Ciudadana, Germán Lago, los jefes de los servicios, Antonio Alfeirán y Carlos García Touriñán, y los representantes sindicales, comenzarán a reunirse este mismo año y, si las perspectivas se cumplen, los documento estarán listos antes de que llegue el verano.
En esos documentos quedarán reflejadas informaciones tan básicas como las condiciones en las que deben realizarse los servicios, los procedimientos burocráticos y administrativos, las obligaciones de los funcionarios según su rango o las condiciones en las que pueden pasar a segunda actividad. Puede extrañar que tanto bomberos como la Policía Local hayan estado décadas (el 092 existe desde hace más de 25 años) en funcionamiento sin que nadie se haya molestado en redactar un reglamento y, de hecho, desde la Concejalía de Seguridad Ciudadana reconocen que la situación era bastante irreal.
En realidad, una de las primeras medidas que adoptó el director de esta área cuando asumió su cargo, hace más de dos años, fue escribir un borrador de ambos documentos, que fueron a parar al despacho del por entonces concejal de Personal, el socialista José Nogueira, donde permaneció acumulando polvo hasta que los nuevos responsables decidieron retomarlo la pasada semana. Fue entonces cuando el teniente de alcalde Julio Flores, a instancias del jefe de Personal, dio instrucciones a Lago para que diera los pasos necesarios para que retomara el proceso desde donde se había abandonado.
Demandas > Algunas de las cuestiones que se negociarán para incluirlas en el reglamento, como la posibilidad de pasar a una segunda ocupación, son demandas largamente reclamadas por los sindicatos, que consideran que, especialmente en el caso de la Policía Local, destinar a agentes ya mayores a tareas de escasas exigencias físicas podría servir para paliar la escasez crónica de efectivos. La ley que regula esta figura es la de Coordinación de Policías Locales de Galicia 4/2007, que refleja que los funcionarios que no sean aptos físicamente para el pleno servicio activo, ya sea por edad o por haber sufrido alguna lesión, podrán seguir desempeñando su trabajo en otros destinos.
Esos destinos podrían incluir lugares que ahora cuentan con vigilancia privada a pesar de ser públicos, como el monte de San Pedro, que le cuesta a las arcas públicas 170.000 euros al año. Otro punto importante que también reivindican los funcionarios es la flexibilización del calendario de vacaciones para poder compatibilizar mejor la vida familiar y laboral y, al mismo tiempo, evitar el descenso en el número de efectivos que provoca la llegada del verano.
En cuanto a los bomberos, en la actualidad siguen un sistema que establece una jornada laboral continua de 24 horas, seguida de otros cuatro días libres. Esto ocasiona dificultades para que los funcionarios puedan seguir un plan de formación, y también es difícil de compatibilizar con los calendarios de descanso y de libranzas. En ambos casos, los nuevos reglamentos contemplarán también la regulación de permisos, las licencias y cambios de servicios, jornadas y horarios laborales.
A pesar de que llegar a un acuerdo que satisfaga a todas las partes supondrá muchas horas de reuniones por parte de las mesas técnicas, es de esperar que las negociaciones fluyan con relativa facilidad porque, sobre todo en el caso de la Policía Local, los representantes sindicales han venido apoyando sin reservas las modificaciones que ha implantado Flores desde su llegada, modificaciones planificadas por Lago. Éste, aunque fue escogido por los socialistas para ocupar su actual cargo, recibió con la llegada al poder del PP carta blanca para poner en marcha muchos proyectos que el gobierno bipartito había aparcado porque no coincidían con sus intereses, y que solo ahora han podido ver la luz.
