El pleno aprobará el lunes que se puedan anular las multas de la ORA

Semanas de discusiones y desencuentros sobre la medida para que los coruñeses puedan anular las multas de la ORA en las propias máquinas –en un corto período de tiempo después de que se produzca la infracción– darán paso a la aprobación definitiva de este servicio extra en el pleno del próximo lunes. Desde el Gobierno local pelearán porque ese dinero que se generará con los recargos para suspender el proceso de sanción vaya a parar a las arcas municipales.

La comisión informativa de Movilidad Sostenible celebrada ayer desestimó la alegación de una particular a la ordenanza de la ORA abriendo paso así a la aprobación de un añadido a la normativa según el cual se podrán anular los avisos de denuncias emitidos por la adjudicataria del servicio. Mientras que el Partido Popular se abstuvo en la votación, el PSOE y el BNG apoyaron la desestimación del recurso, por lo que el Gobierno local someterá este tema y la novedad a aprobación en el pleno del lunes.

Una vez que se haga oficial que no se atenderá la alegación y que se podrá evitar la multa durante un período de tiempo limitado, las máquinas de pago de las zonas ORA serán las herramientas a través de las que los conductores gestionarán los conflictos.

De 1,5 a seis euros
Aquellos que reciban un aviso de denuncia por sobrepasar el tiempo abonado o por no haber colocado el correspondiente recibo en el vehículo podrán anular la multa del controlador abonando un recargo. Según explican desde los grupos, la cuantía del mismo variará en función del error o la infracción que haya cometido cada coruñés.

Es decir, habrá distintas tarifas: por impago habrá un margen de una hora para pagar seis euros después de recibir el aviso, mientras que si se sobrepasa el tiempo que indica el recibo habrá dos opciones. Si se paga en una hora el recargo será de 1,5 euros y si se realiza el pago entre una y dos horas tras la advertencia el importe subirá a tres euros.

Esta medida vendrá a regularizar los problemas causados hace algunos meses por la llegada indiscriminada de multas a muchos ciudadanos. Ante la contestación social, en aquel momento se optó por sancionar solo a los conductores reincidentes a la espera de que los demás tuvieran el margen de la anulación inmediata.

Todavía persisten algunas dudas sobre a dónde irá a parar el dinero que se recaude en los parquímetros por el abono de las anulaciones pero el Ayuntamiento dijo tener en su poder informes que indican que los ingresos deben revertir en las cuentas de María Pita y no en las de la firma.