Los placeros de Santa Lucía obtienen una prórroga hasta el 26 de julio

El día 26 de julio se acaba la concesión del mercado de Santa Lucía. Es lo único que tienen claro y conocen de manera oficial los placeros, explica José Miguel Guridi, portavoz, que ayer recibieron la noticia a última hora de la mañana de que esta prórroga se haría efectiva. “No sabemos nada, si nos tenemos que buscar la vida o si tenemos que esperar”, lamenta.
El inmueble va a ser reformado. El anteproyecto “se presentará en marzo” y no será hasta entonces cuando se desvele la incógnita de si será factible compaginar estos trabajos con la venta diaria. Los afectados se acercaron ayer hasta el registro municipal para entregar 3.900 firmas con las que exigen la “continuidad, dentro o fuera del edificio” de su actividad, como subraya Guridi.
Lamenta que desde el Ayuntamiento no les hayan llamado para explicarles cuál es la intención que tienen desde María Pita. “No sabemos qué hacer, porque de una semana para otra no montas un negocio. Te hacen falta los seis meses que faltan. Incluso si empiezas ahora a reformar un local y pedir permisos, llegarías justo a julio”.

Adjudicación
Pero la situación aún se complica más para estos placeros. A diferencia de otros mercados de la ciudad, en el caso de Santa Lucía, el Ayuntamiento sacó a concurso la concesión, por lo que, quien se encarga del alquiler de los puestos es una empresa.
Este contrata finaliza el 26 de julio, por lo que, los placeros tendrían que abandonar sus puestos de trabajo. Pero, “depende de lo que quiera el Ayuntamiento”. El gobierno local podría sacar a concurso cada puesto, o, de nuevo, realizar una concesión para que gestione una empresa. Una situación que afecta de manera directa a 17 negocios que dan empleo a 30 personas.
En este sentido, critican que el gobierno local aún no les haya dicho nada. Hace unos meses la oposición presentó una moción, que respaldó el PP, “en la que uno de los puntos era la reubicación durante las obras y cierta garantía de seguir con los puestos, pero de momento”, expone Guridi, no saben “nada” sobre lo que ocurrirá a partir de ese día 26 de julio.
Ante esta situación, y para tratar de dilucidar lo que pasará con su futuro laboral, los placeros han decidido solicitar una reunión con los responsables del Ayuntamiento, en concreto con Luisa Cid, responsable de Empleo, para que les expliquen qué va a pasar con la concesión y con las obras.  Sobre la ejecución de los trabajos, explican que la duración prevista es “mínimo” de 24 meses, pero que se podría prolongar hasta los “36” meses. Además, entienden que, aunque la adjudicación finalice el 26 de julio, las obras de este inmueble “no van a empezar” hasta finales de año.
A mayores, continuarán con las movilizaciones para lograr esa reubicación que ya empezaron meses atrás. A este respecto, el portavoz de los placeros anuncia que  “todos los jueves”, los afectados llevarán a cabo un cierre simbólico de los puestos a las doce del medio día.