9º-16º
martes | 23 abril | 2024
Xunta y funcionarios de Xustiza retomarán hoy las negociaciones, pero, según el Colegio de Abogados de la provincia de A Coruña, el daño está hecho y necesitarán muchos meses para que la situación en los juzgados se normalice. Y es que el Registro Civil ralentiza los trámites hasta el punto de que en la ciudad hay muertos vivos y altas que todavía no son entes legales. El decano, Augusto Pérez-Cepeda, señala que el parón está derivando en “situaciones muy graves” porque aunque las del registro se visualizan fácil, están los embargos que igual se pueden levantar porque el susodicho abona la cuantía, pero no se hace, o víctimas de violencia de género con denuncias que no se formalizan: “Solo se atienden los casos más graves, pero, ¿qué no es grave en este apartado?”.
Aún así, apunta que al menos lo que entra se está repartiendo y no como al principio, “que no se movían papeles”. Para letrados que trabajan mucho el pleito, la huelga implica dejar de cobrar porque “los seguros y los bancos si no hay sentencia no pagan” y los clientes tampoco. De todas formas, señala que estos siguen acudiendo al despacho a requerir sus servicios.
Es el caso de los matrimonios rotos que acuden aunque saben que el divorcio se postergará en el tiempo, “por lo menos van entregando documentación”. Lo que sí asegura que no provoca la parada es que las parejas finalicen su contrato de manera amistosa. Para Pérez-Cepeda no hay nada positivo del asunto. Por eso, pide a ambas partes que “negocien seriamente y todo vuelva a la normalidad”, que los coruñeses viudos puedan cobrar las pensiones de sus difuntos y que se computen los nacimientos nuevos.
De los 3.500 colegiados de la provincia, sobre 2.000 en la ciudad, la mayoría está tirando de los ahorros. Les salva que muchos tienen otras fuentes de ingresos más allá de lo judicial.
