La oposición critica los “retrasos” en la aprobación definitiva del Pepri

En tono crítico respondieron ayer los grupos municipales del BNG y el PSOE al anuncio por parte del Ayuntamiento sobre la aprobación definitiva del Pepri (el plan especial de protección y reforma interior de la Ciudad Vieja y Pescadería), que podría llegar a finales de este año. Según lo interpretan, el gobierno local ha dejado “para el final del mandato” un trámite que estaba en el programa electoral del PP y que, según alertan los socialistas, “ya debería estar en vigor”, ya que deja, dicen, “a más de mil vecinos con la incertidumbre que supone no saber qué ocurrirá con el fuera de ordenación”.
Tal como señalan desde el PSOE, el documento generó “un profundo malestar” entre los vecinos de los dos distritos afectados y recibió, tras su aprobación inicial, un total de 1.563 alegaciones, de las cuales 1.165 tenían que ver en exclusiva con el fuera de ordenación. “Y es que un número importante de vecinos siguen sin saber qué pasará con sus viviendas, pues el fuera de ordenación que Negreira ha introducido en el Pepri afecta a unos 800 edificios del centro”, indican los socialistas. Tal como recuerdan, los inmuebles afectados por esta figura “tendrían que ser reconstruidos de forma distinta a la que tienen  en la actualidad en caso de que fuesen sometidos a obras, y en algunos de ellos incluso sería necesario eliminar una o más alturas para adaptarse a la normativa”.

"trapalladas"
Por su parte, desde el BNG vinculan los retrasos en la aprobación definitiva del plan con la “renuncia” –por parte del gobierno local– de continuar a tramitación do Plan Especial del Puerto y con el relativo a la mejora de la movilidad en la zona de la Marina y O Parrote. Según alerta, los tres documentos tenían “contradiccións” entre sí y no daban amparo a las obras de urbanización de la Marina. “A improvisación e as trapalladas de xestión urbanística fan que o goberno local non sexa críbel respecto o Pepri cando informa dos prazos”, censuran desde esta formación.
Los nacionalistas alertan de que el Ayuntamiento incorporará  en el Pepri “os cambios que fagan falta e as determinaciones que correspondan dos outros dous documentos aos que se renuncia”.
En el PSOE  dicen confiar en que el retraso no sea “una decisión premeditada para evitar las protestas vecinales por el fuera de ordenación y que este rechazo tenga consecuencias electorales” sobre el gobierno que encabeza Carlos Negreira.