O Ventorrillo pedirá en la calle que se termine el tráfico de drogas en Penamoa

redacción > a coruña
  Los vecinos de los barrios próximos al asentamiento chabolista de Penamoa se manifestarán esta tarde a partir de las 20.00 horas para pedir responsabilidades al gobierno municipal por lo que consideran un “engaño” a los ciudadanos. Residentes en O Ventorrillo, Cances, A Silva y A Moura –que integran la Plataforma Ventorrillo Desmantelamento Penamoa– se quejan que el alcalde Javier Losada, prometió en su día y en diferentes momentos de su legislatura que el asentamiento sería completamente desmantelado antes de finalizar su mandato y que el tráfico de drogas sería erradicado. En contraposición a estas afirmaciones, los residentes aseguran que el compromiso electoral adquirido hace cuatro años no se ha llegado a cumplir aún hoy y en Penamoa no sólo “sigue existiendo”, sino que además muestran “su peor cara” en la actualidad.
Lamentan asimismo que muchas de las chabolas siguen en pie y el tráfico de drogas es una “cruda realidad constante” que sufren todos los que habitan el entorno. Ante esta situación de “engaño, olvido y abandono” han decidido convocar esta marcha que saldrá desde el colegio de Primaria María Barbeito –en la calle del Alcalde Salorio Suárez– bajo el lema “Para que no te engañen y lo veas por ti mismo”.  

Corte de tráfico > Pretenden que el recorrido termine en el poblado, como ya han intentado en otras ocasiones. Probablemente la movilización que tuvo mayor trascendencia fue una convocada hace menos de dos años.
En aquella ocasión, los residentes de O Ventorrillo, que inicialmente habían planeado nua tranquila concentración, terminaron por cortar el tráfico en la ronda de Outeiro al grito de “Penamoa libre de drogas”. Desde entonces se han sucedido una serie importante de actos de repulsa contra el tráfico de drogas en la zona, en la mayoría de las cuales se han sucedido las críticas al gobierno local y a las gestiones tanto del primer edil como de al concejala de Servicios Sociales, Silvia Longueira a los que han acusado de mentir sobre lo que realmente ocurre en el poblado.