Ni la lluvia diluye el “hambre” de movilizaciones

Con la huelga general del 14 de noviembre planeando sobre el horizonte, la jornada de ayer volvió a estar cuajada de protestas de toda índole y condición que colapsaron la ciudad en momentos puntuales. El pistoletazo de salida lo daban los empleados de Correos a las nueve y media de la mañana con una concentración frente a la sede principal para luego pasar el testigo a sus compañeros de la delegación de Hacienda y otras áreas de la admnistración pública.

El punto de originalidad lo pusieron los trabajadores de juzgados, que organizaron una cadena humana y una cacerolada para denunciar los recortes y el dispendio que supone el macrojuicio del “Prestige”, “fronte a falta de investimento en medios materiais e persoais na Xustiza”. Pese a la proliferación de protestas, el tráfico matinal apenas se resintió.

conductor detenido

Por la tarde se celebró una nueva manifestación de los estudiantes. En este caso sí hubo cortes de tráfico y retenciones.

Cuando la marcha discurría por Menéndez Pelayo, un conductor se saltó el corte y rozó a un policía que le daba el alto. Interceptado tras tratar de huir, arrojó una tasa de alcohol de 0,80, más de triple de lo permitido, por lo que fue detenido. n