La música de Las Angustias precede el paso del Cristo del Buen Consuelo

Entre la claridad de día y la oscuridad de la noche salió de nuevo a las calles coruñesas la procesión del Santísimo Cristo del Buen Consuelo. Poco antes terminaba en la plaza de Lugo el pasacalles procesional de la Cofradía de Las Angustias –que repetía el acto por segundo año–, un recorrido de música penitencial que sirvió también para celebrar los diez años de la que es la única cofradía de barrio de la ciudad. 
Los encargados de custodiar el paso fueron miembros de la Policía Nacional, que es el cuerpo que tiene asignado el paso que representa a Cristo crucificado junto a Nuestra Señora de las Penas. La talla de esta figura de Cristo data del siglo XVI, aunque de esta época solo se conservan el tronco y la cabeza, mientras que las extremidades son del XVIII. 
El paso sobrecogió a cofrades, devotos y a los asistentes en general, que en respetuoso silencio siguieron el camino de la procesión por la Ciudad Vieja, en el último acto antes de la llegada de las grandes jornadas del calendario santo coruñés. l