Muere un obrero en punta Langosteira aplastado por la grúa que desmontaba

  Las obras del Puerto Exterior se han llevado la vida de otro trabajador y, de nuevo, personal de una subcontrata. Esta vez la víctima pertenecía a la empresa que gestiona las grandes grúas Liebherr 11.350 de Langosteira, el grupo Usabiaga, y precisamente el operario falleció cuando desmontaba una de ellas, tras haber concluido el proceso de colocación de bloques en el dique. La muerte se produjo al desplomarse parte de la estructura, que aplastó a la víctima.
El suceso se registró a las seis y veinticinco de la tarde y una hora después, según denuncia el comité de empresa, todavía ningún responsable de la Autoridad Portuaria había llegado al lugar. Solo el jefe administrativo de la UTE adjudicataria de las obras estaba presente en Langosteira.
El fallecido es Emilio José Amigo Díaz, de 34 años de edad, y vecino de Muxía. Amigo era hijo único, estaba casado y el de ayer era su último día de trabajo en el Puerto Exterior, puesto que, según informan los compañeros, el desmontaje de la grúa estaba prácticamente finalizado, con la intención de trasladar la maquinaria a Panamá. Además, la víctima era afiliada al sindicato mayoritario en el comité del Puerto Exterior, la CIG, cuyos portavoces se personaron en el lugar del accidente.  

Causas > Desde la Autoridad Portuaria no aclaran cómo se produjo el suceso, pero según ha podido saber este periódico a través de los trabajadores, uno de los tramos de la estructura –este tipo de grúas se componen por secciones– se cayó sobre el trabajador. En concreto, la versión que transmitían desde el comité de empresa es que varios empleados trataban de retirar uno de los bolones de la grúa –son los pasadores que unen las diferentes partes–, pero al no lograrlo procedieron a utilizar gatos hidráulicos y a golpearlo hasta que la pieza salió. En momento, parece que los puntos de apoyo de la estructura cedieron y una viga se desplomó sobre el hombre provocándole fracturas en el cráneo.
Desde la CIG relacionan la dificultad de sacar el pasador con la falta de mantenimiento de la maquinaria. “Se estivese ben engrasada tiña que sair”, denuncia el portavoz comarcal Paulo Carril.

Responsables > El cadáver permaneció en el dique hasta que la jueza de guardia se desplazó a Langosteira pasadas las ocho de la tarde. También sobre esa hora aparecieron otros portavoces de la Autoridad Portuaria, como el director y los responsables de seguridad. Este organismo expresa, a través de un comunicado, su “profundo pesar por el fatal desenlace del siniestro”. Además, informa de que, como es habitual en estos casos, se ha procedido a abrir una investigación para esclarecer las causas del accidente, para lo que se ha solicitado a la constructora un informe de lo sucedido.
Por otro lado, en el muelle corrían rumores de que el cadáver había sido movido del lugar del siniestro y ningún compañero se responsabilizaba de esta acción. Puede que fuese este hecho el que  retrasara el levantamiento del cadáver que no salió de las instalaciones hasta pasadas las diez y media de la noche. A esa misma hora la familia del fallecido estaba en las instalaciones.