La morosidad de los universitarios se multiplicó por cuatro en solo un curso

El capítulo económico de la Universidad arroja datos nada halagüeños sobre el futuro de la entidad. Y es que, según reflejan las cuentas del pasado 2012, la Universidad cerró el ejercicio con más de 20,5 millones que no pudo cobrar. El dato resulta más llamativo si se tiene en cuenta el agujero económico que ya acumula la entidad por impagos desde 2003 hasta 2011 y que añade otros 11 millones de euros a este epígrafe.
A pesar de que las cifras globales escandalizan, resultan mucho más significativas si se desglosan por capítulos. Sobre todo, el referente a la morosidad de los alumnos. Y es que los datos echan por tierra las previsiones que manejaba la entidad y son mucho más demoledores. Solo durante 2012, la deuda por impago de tasas y precios públicos, es decir, las correspondientes a las matrículas de los alumnos, rozó los 5,5 millones de euros. Eso, cuando, durante el pasado curso académico, esa cifra apenas superaba los 1.200.000 euros.
Un incremento, por tanto, de un 423%; más de cuatro millones de euros de subida en apenas un curso académico. Este es uno de los peores datos que maneja la Universidad coruñesa y que evidencian las dificultades económicas que atraviesan las familias con hijos cursando estudios superiores.
Unas dificultades que se han venido constatando desde cursos anteriores ya que, al cierre de 2012, aún quedaban cobros pendientes por estos asuntos de años como 2009, 2010 y 2011. La deuda acumulada de estas tres anualidades supone casi 57.000 euros no satisfechos a favor de la Universidad.
 
fondo social y más deudas
Con los datos económicos en la mano y la previsión de que la situación sería más complicada en los próximos cursos, el rector, Xosé Luis Armesto, anunciaba el pasado mes de junio la creación de un fondo social para ayudar a los alumnos a sufragar los gastos de sus estudios. Esta bolsa de ayudas estará dotada con 115.000 euros y tiene como finalidad facilitar el acceso del alumnado a las titulaciones superiores. El importe de la ayuda que se conceda podría cubrir el 100% del coste de la matrícula. Además, la Universidad pondrá en marcha otra serie de becas y ayudas. En total, se destinarán un millón y medio de euros.
Si bien las deudas provenientes de matrículas no cobradas son uno de los capítulos más importantes, no menos abultado es el epígrafe que recoge aquellos derecho pendientes calificados como “de dudoso cobro”. El pasado 2012 no fue un año especialmente complicado en esta cuestión, aunque al cierre del ejercicio la deuda acumulada rozaba los 5 millones de euros. De ellos, 4.680.000 euros ya constaban a finales de 2011 en concepto de anticipo de parques de 2007 y la anualidad de 2008.
En el capítulo de deberes, en las cuentas de la Universidad coruñesa figuran como pendientes de pago un total de 2.287.223 euros. De ellos, 886.682,20 euros corresponden a gastos de personal y otros 872.436,28 euros a bines corrientes y servicios .