“Mis raíces son gallegas y aquí debía estar; lo hago con la máxima ilusión”

Con la etiqueta de estar entre los mejores del panorama taurino actual y con la sinceridad de quien se mueve por pasión más que por popularidad, el torero de origen coruñés Iván Fandiño regresa a la ciudad en la que pasó los veranos de su infancia para triunfar mañana en la arena del Coliseo.

Retrasó el final de temporada para estar en Coruña, ¿era parada obligada, por sus raíces gallegas?
Era parada obligada para mí. Por responsabilidad e ilusión. Mis raíces son gallegas y aquí debía estar; lo hago con la máxima ilusión.

¿Cómo es de exigente la afición coruñesa?
Por circunstancias, solo he actuado una vez, y aunque no corté orejas por mis desaciertos con la espada, la afición se volcó conmigo. Es pasional, pero sorprendentemente entendida.

Llegar a la celebración de esta feria ha sido complicado, ¿los taurinos deberían hacerse notar más?
Claro que sí. Luego nos damos golpes en el pecho por Barcelona y San Sebastián. El movimiento se demuestra andando.

Dicen que de su toreo destaca la pureza, ¿el estilo se crea o es innato?
Se mejora la técnica, el toreo es innato. Intento ser puro y sincero en la plaza y en la vida.

¿Se marca un techo en su carrera?
No, nunca. El día que crea que no puedo crecer más, diré adiós. Soy ambicioso y competitivo y el día que no pueda ganar pondré punto final.

¿El miedo es buen compañero de faena?
El mejor. El miedo es necesario, te mantiene alerta. Te debe tener caliente pero no quejarte. Es tu aliado, amigo y compañero. Pero siempre debe estar por debajo de ti.
¿Sale a la arena de forma diferente si su familia está viéndole?
No. Mi compromiso es conmigo mismo y con el toreo.

¿Las condiciones de la plaza, cubierta en este caso, influyen en la corrida?
Ayudan. El peor enemigo para el toreo es el viento, y en las plazas cubiertas desaparece. Además, mejora la acústica. A mí me gustan las plazas cubiertas.

¿Marcará en la agenda la visita a la ciudad para la próxima temporada?
A Coruña tiene una señal muy especial en mi agenda, son muchos veranos en mi niñez.