Milladoiro repasa sus treinta años de carerra en la ciudad que les vio nacer

Milladoiro repasa sus treinta años de carerra en la ciudad que les vio nacer

A pesar de llevar más de treinta años pisando los escenarios, los componentes de Milladoiro siguen sintiendo el mismo vértigo que el primer día al subir a las tablas y ofrecer su música ante el público. Para los integrantes del grupo, esta actitud es una premisa fundamental para seguir haciendo de la música una forma de vida y, además, una gran pasión. De esa inquietud, esos nervios y ese buen hacer tras tantos años de carrera prentenden dar buena cuenta el viernes, sobre las tablas del teatro Colón.

Los músicos afrontan su actuación del viernes en el Colón como “voltar á casa”

Vuelven a la ciudad en la que dieron el pistoletazo de salida a una extensa carrera musical, que arrancó en 1979. “Actuar no teatro Colón é como voltar a casa”, apuntan los miembros del mítico grupo. Moncho García recuerda las “fantásticas sensacións” de tocar en A Coruña, a donde dicen necesitar volver periódicamente. También expresa el músico la necesidad de regresar a “un teatro que forma parte da nosa historia”. Para su compañero, Pepe Ferreiros, el público coruñés y, en particular, el del Coón “é moi fiel ao grupo, é como vir a casa. Un público aberto ás propostas. Vir aquí é sentir que a xente sente a nosa música como propia”, argumentó.

La antesala del propio teatro acogió ayer la presentación de este nuevo concierto, que corrió a cargo de tres de los miembros del grupo.

 

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Hablando de la propia formación, Moncho García destacó que tienen superados diferentes contratiempos para poder seguir juntos. “Se é complicadísimo un matrimonio entre dous, imaxina entre seis”. Señaló el hecho de que el grupo está “baseado na renuncia individual ao favor dun coelctivo, unha idea que trascende máis alá de Milladoiro”, explicó.

El grupo no tiene pensado preparar un nuevo trabajo discográfico, por el momento, y es que como explicó Nando Casal, “nestes tempos de crise a cultura é a primeira sacrificada”. Por el momento, continúan trabajando sobre las tablas y el viernes subirán al escenario del teatro Colón porque, como ellos mismos comentan, “crea adición, botas de menos o non facelo. Cando non sintas eso, musicalmente estás morto”. “Se non sentes ese nerviosismo é mellor deixalo, parar. Ten que ser como o primeiro día, co nervio a flor de pel”, señala. Ellos aún pueden presumir de nervios y pasión. n

 

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