Los miembros de Protección Civil reparten ya cien comidas diarias

Con la población enclaustrada en sus casas, las necesidades básicas son más difíciles de cubrir. Aquellos que no pueden salir a la calle para acudir a las tiendas de alimentación, ya sea por problemas de movilidad o escasez de recursos, cuentan con la ayuda de Protección Civil, que estos días reparte cerca de cien comidas diarias de los comedores sociales de la ciudad.

Algunas las recogen en la Cocina Económica. Otras, en los comedores que sirven a los menores con escasos recursos, donde acompañan a los voluntarios de Participación Ciudadana reclutados para esta crisis. De esta manera, uno de los pocos vehículos que se pueden ver circulando estos días por la ciudad es el de Protección Civil, llevando de un punto a otro la comida

Cerca de 530 personas respondieron a la llamada del Ayuntamiento pero, por el momento, solo se mantienen activos a 133, según el último cómputo.

Para la Tercera Edad

Los miembros de Protección Civil acompañan a estos voluntarios en su primera visita a la persona que van a ayudar para presentarlos. Como señala Carmen Pita, directora de Participación Ciudadana: “Uno de los casos más habituales es el de gente mayor a la que hay que buscarle las recetas”.

Asegura que está funcionando muy bien la “autoorganización”: es decir, que el voluntario y la persona a la que ayuda se comunican directamente a través del teléfono personal en vez de hacerlo a través del 010. “Así no lo colapsamos”; explica Pita Cada voluntario recibe cinco mascarillas y guantes y cada tres días supervisan que todo vaya bien en el servicio.

Pita espera que la actividad aumente aún más con motivo de la puesta en marcha del nuevo teléfono de acompañamiento, que se activará hoy: el 900 920 500.