Más de 500 personas siguen con interés los consejos del “Hermano Mayor”

Se le auguraba un éxito total y no defraudó. Más de 500 personas acudieron ayer a la charla que Pedro García Aguado impartió en Espacio Coruña, y que volverá a repetirse esta misma tarde. El deportista, conocido por el programa televisivo “Hermano Mayor”, ofreció ante el público algunos de los consejos básicos a la hora de abordar la educación de los hijos.

¿Cómo acertar?, ¿cómo se sabe cuándo se está yendo por el buen camino?, ¿cómo es posible que en una misma familia, los hermanos sean tan distintos unos de otros? Estas fueron algunas de las premisas sobre las que partió la conferencia de García Aguado, que fue seguida al detalle por todos los presentes. Entre el público, muchos padres, acompañados de sus hijos –en su mayoría adolescentes–, deseosos de encontrar las claves para evitar caer en los errores básicos, que pudieran dar al traste con toda la educación de los menores.

claves

“¿Educamos a nuestros hijos en el principio de realidad?” Se cuestionaba el experto. El exdeportista exponía ante los presentes el hecho de que los padres están acostumbrados a dar a los hijos “todo lo que quieren desde que nacen”. Probablemente, explicaba García Aguado, sea porque muchos de ellos han pasado épocas de privación y ahora quieren resarcirse y compensar a sus hijos con todo lo que ellos no pudieron tener.

También, argumenta el experto, gracias a esta situación de bienestar permanente que se crea en los niños, estos acaban creyendo que tendrán siempre todo lo que quieran y que conseguirán lo que deseen. Aguado recordaba ayer a los padres que hay que tener en cuenta que esto no siempre será posible, y que los pequeños deben ser conscientes de esto.

También quiso resaltar la idea de que “cada niño es distinto a otro”. No valen los mismos métodos para todos, ni la misma educación, ni los mismos criterios. Puso como ejemplo sus propias hijas y el carácter diferenciado de una y otra. “Mientras a una basta con decirle que no una vez, a la otra hay que decírselo quince veces. Y si lo hago catorce, lo hago mal”, explicaba el exdeportista.

Otra de las cuestiones que se abordó durante la charla fue la relación de los menores con sus profesores en el colegio. Aguado se mostró preocupado por el hecho de que cada vez se le quita más autoridad a los profesores y recordó que la mayoría de los fracasos escolares, aunque se manifiestan en el tramo educativo de Secundaria, “se fraguan en los cursos de Primaria”. Al hilo, recordó en que muchas veces los estudiantes echan mano de la socorrida frase “el profesor me tiene manía” para disculpar su actitud en el centro e insistió en que los padres tienen que preguntarse si el comportamiento de sus hijos es el correcto o de dónde puede venir la “manía” del profesor.

“Los hijos son una proyección de lo que hacemos con ellos”, señalaba Aguado, que recalcó que los padres deben tener una implicación activa y positiva en la educación y desarollarla de una forma “personalizada”.