La Marea cede a la indignación vecinal en Os Mallos y explica qué obras realizará en la calle de San Vicente

El enfado mayúsculo de los vecinos y comerciantes de Os Mallos, y la denuncia del grupo municipal del Partido Popular, al descubrir que el Ayuntamiento iniciará mañana una obra de gran calado en el barrio sin comunicarlo de antemano ni consensuar la actuación, ha provocado una rápida reacción en María Pita. Tras palpar la indignación y saber que se estaba convocando una reunión pública, la Concejalía de Regeneración Urbana salió ayer a la palestra para explicar en qué consistirá la reurbanización que obligará a cortar una calle tan concurrida como la de San Vicente durante dos meses.
En sus explicaciones el Gobierno local asegura que estos trabajos ya se habían comunicado a los residentes en el entorno y al tejido asociativo “hai varios meses”. No obstante, ambas partes afectadas negaban este viernes tener conocimiento del proyecto y haber tenido la oportunidad de opinar. Se encontraron con una cartelería a final de semana informando sobre unos cambios en el tráfico que se harán efectivos mañana mismo.
De hecho, la Marea reconoce que “o inminente inicio das obras provocará cortes” en la circulación. En cierto modo también asume que no se había tratado el asunto, o al menos no con la suficiente profundidad, de manera colectiva, dado que el concejal de Regeneración Urbana, Xiao Varela aseguró que en las próximas semanas hablará con los vecinos para que estos le puedan trasladar ideas acerca de las actuaciones en marcha.

Restricciones en dos fases
Al margen de la polémica generada, pero claramente como respuesta a ella, el Consistorio concretó que desde mañana hasta el próximo 23 de marzo se cortará totalmente el tramo de la calle de San Vicente comprendido entre Ángel Senra y Ramón Cabanillas.
Esta primera afección se deberá, entre otras cuestiones, a los trabajos para canalizar una red separada de aguas fecales y pluviales. No obstante, ya este miércoles se procederá al corte total de la infraestructura y los vehículos que lleguen a la zona desde la ronda de Outeiro serán desviados por Eugenio Carré Aldao.
El proyecto, que cuenta con un presupuesto de 289.432 euros, cogió por sorpresa al barrio, que pudo saber algunas pinceladas a través de llamadas particulares. Por ello, Varela comentó a dos días de proceder a la restricción del tráfico, que durante cuatro meses tratarán de mejorar las condiciones de la vía y los servicios para la circulación rodada y el tránsito peatonal. Se renovará el pavimento y se garantizará la accesibilidad. La apertura de zanjas se aprovechará para renovar la red de saneamiento y comunicaciones, si bien al finalizar se volverán a habilitar las mismas plazas de estacionamiento.

Problemas históricos
“O executivo municipal da Coruña ten unha liña clara de actuación, que pasa pola mellora integral dos barrios. Esta obra para poñer a punto San Vicente é un exemplo claro desta forma de entender o traballo que unha administración debe levar a cabo no espazo público”, recalcó el representante del Gobierno local.
Asimismo justificó la actuación como una forma de “dar resposta a unha serie de eivas históricas nesta rúa, que conta cun pavimento de calzada moi deteriorado, igual, por outro lado, que o que presentan as beirarrúas, que dificultan a accesibilidade do tránsito peonil”.