La Marea Atlántica busca de nuevo que el PSOE se convierta en su aliado

La Marea Atlántica vuelve a buscar aliados dentro de la corporación municipal para intentar tener mayor facilidad a la hora de sacar adelante sus proyectos y su principal objetivo es el Partido Socialista. El alcalde, Xulio Ferreiro, y el portavoz del PSOE, José Manuel García, volvieron a mantener contactos en las últimas fechas para ver si era posible un acercamiento entre ambas formaciones, en un movimiento cuya iniciativa corrió a cargo del Gobierno municipal.

El tema principal que hubo sobre la mesa fueron las alegaciones al presupuesto y la estimación o no de las mismas en la Comisión de Hacienda, en la que la oposición terminó obligando al Ayuntamiento a cambios por valor de 5,65 millones de euros, más otros 1,6 millones que ya había considerado el interventor.

Además, este encuentro entre los líderes de ambas formaciones también sirvió como una toma de contacto para analizar cómo están las relaciones entre ambos partidos.

Hace tres meses, el abrupto final de las negociaciones sobre el presupuesto dejó muy dañadas las relaciones entre ambos y desde entonces apenas se volvieron a sentar a conversar salvo en la ronda de contactos que hizo el regidor con los líderes de la oposición, a mediados del pasado marzo, y en la que la movilidad, el futuro de los muelles interiores y el área metropolitana fueron los principales asuntos tratados.

Ferreiro se mostró ayer dispuesto a estabilizar una alianza con el Partido Socialista, cuyo líder también dejó la puerta abierta en los últimos días a mejorar las relaciones con la Marea tras decir que después de lo visto no entregarían un cheque en blanco al equipo de gobierno.

Sin embargo, el alcalde quiere que los socialistas vayan más allá de una declaración de intenciones y les pide que un posible acercamiento “se poida ver en cuestións concretas”. Una de esas cuestiones es la aprobación de las cuentas de Emalcsa, que se someterán próximamente a la votación de su consejo de administración. Xulio Ferreiro espera que el Partido Socialista les apoye en el consejo y así sacar adelante unas cuentas cuyos beneficios poder “utilizar no ben da cidade”, explicó el regidor.
Además de esta situación puntual, las intenciones del Gobierno municipal parecen ir dirigidas hacia la creación de un clima más estable con los socialistas, quienes les apoyaron en la investidura de Ferreiro, pero con los que desde entonces la relación ha estado marcada por fuertes desencuentros.

Apoyos
En el trasfondo de este acercamiento también está la constitución del área metropolitana, un asunto por el que la Marea muestra gran interés, pero en el que necesitará el apoyo de otras formaciones para sacar adelante propuestas concretas en el pleno.
Hasta el momento, los pasos que el Gobierno local ha dado en este asunto son de carácter inicial y de establecer una hoja de ruta junto al resto de municipios implicados, pero los grupos de la oposición están siendo mantenidos al margen.
Durante este tiempo, desde el Partido Socialista mostraron su desacuerdo con la manera en la que estaba gestionando la Marea la constitución del área metropolitana, un proceso del que se siente excluidos, igual que el Partido Popular y el BNG.
En la línea de otros asuntos, el PSOE también reclama al Ayuntamiento que en esta cuestión los primeros implicados deben ser las formaciones de la corporación municipal, ya que se trata de una iniciativa destinada a perdurar durante futuros mandatos, por lo que creen que es necesario que todos los partidos contribuyan a su formación.

Otros asuntos
La movilidad y el futuro de los muelles interiores fueron los otros grandes temas planteados por Xulio Ferreiro a José Manuel García a mediados de marzo y sobre los que apenas hubo avances hasta ahora, por lo que la Marea mantiene la esperanza de poder llegar a algún acuerdo con el PSOE sobre ellos.

Estos asuntos son dos de los mayores desafíos que tiene el Gobierno local sobre la mesa y en los que le interesa contar con el apoyo de los socialistas, lo que les otorgaría la mayoría necesaria en el salón de plenos. Es precisamente en ese lugar en el que la Marea se está encontrando con los mayores problemas, ya que su situación de gobernar en minoría y la habitual estrategia de no intentar llegar a acuerdos con la oposición antes de llevar los asuntos al salón les ha costado más de un rechazo.