La Marea aborda la última fase de las obras de Palavea con meses de retraso

Las obras de reurbanización del acceso a Palavea Vieja entraron estos días en su última fase o, al menos eso esperan los vecinos, que llevan varios meses pendientes de que el Ayuntamiento culmine una actuación relativamente sencilla que debería haber acabado en febrero a tenor del mensaje transmitido en ese mes por los concejales en una visita. Desde la Asociación de Vecinos de Palavea destacan que se permitió una parálisis tras varios desencuentros y consiguieron reactivar los trabajos tras negociar, pero una vez termine esta reestructuración tienen más demandas.
“Estamos rematando unha intervención que se debería ter executado hai 20 anos e que consiste na construción dunha beirarrúa que bordee as vivendas e que xere un percorrido seguro e accesible entre Palavea Vella e as promocións residenciais levantadas nas últimas décadas”, afirmaba a principios de febrero el concejal de Regeneración Urbana, Xiao Varela, durante una visita de supervisión al barrio. Sin embargo, ese comentario de que la actuación estaba a punto de finalizarse poco ha tenido que ver con la realidad porque cuatro meses después los obreros todavía continúan en el entorno. En este tiempo los problemas para vecinos y usuarios de un supermercado de la zona han sido una constante, por las diferentes fases abordadas, y aún este miércoles muchos se topaban con el firme del principal acceso al barrio totalmente levantado.
El presidente de la asociación vecinal, Manuel Gómez, reconoce que el proyecto suma ya varios meses de retraso respecto a lo que les habían explicado y espera que ahora, con la aplicación del nuevo asfalto, se dé por cerrado. Según recuerda, las tareas permanecieron paradas bastante tiempo una vez comenzadas y tuvo que ser la agrupación la que instara al Gobierno local a retomarlas.
“Había zonas que estaban mal rematadas y un grupo de vecinos recogió firmas para que lo arreglaran”, cuenta, porque había una acera demasiado ancha o unas esquinas sin retocar que provocaron el reventón de varias ruedas de algunos coches, por las que se reclamará.

Instan a colocar una pasarela
Pero ante las quejas, los obreros se marcharon del lugar, también dejando vallada una zona de acera pegada a un bar. Después de mediar en el asunto, los trabajadores regresaron para cerrar el entorno de la acera que quedó sin arreglar de forma homogénea con el resto porque el local de hostelería, que supuestamente es propietario de este espacio, se negó a tal cambio. Ahora se está asfaltando, se instalará un paso de peatones elevado y se reservará una plaza para carga y descarga.
Gómez recuerda al Ayuntamiento que siguen teniendo otras reivindicaciones porque había un compromiso para instalar la pasarela peatonal pero nada se sabe del tema aunque se realizaron mediciones. Igualmente piden el arreglo de la zona deportiva de la Fábrica de Armas y la habilitación de un aparcamiento en una finca de titularidad municipal. l