Mar toma las primeras muestras en O Burgo para detectar el nivel de mortandad de los moluscos

 Mientras las barreras anticontaminación siguen ubicadas en el puente de O Burgo y el Servizo de Gardacostas intenta evitar que los furtivos extraigan marisco que podrían ser tóxico, comienza la toma de muestras sobre los moluscos por parte de la Consellería do Mar. En concreto, fueron el biólogo de zona de A Coruña y el de la cofradía los que a las tres y media, durante la bajamar, procedieron a realizar los primeros análisis junto a un mariscador de la directiva de a pie para detectar el tasa de mortandad de los bivalvos tras el vertido de queroseno del viernes.
Estas pruebas son diferentes a las que a mediados de semana –desde la Consellería do Mar hablan del miércoles o jueves– realizará el Intecmar (Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño) con el objetivo de conocer el nivel de hidrocarburos que han podido absorber las almejas y berberechos y, con ello, concretar cuándo se podrá retomar la campaña marisquera.
Los muestreos a los que se procedió ayer se realizaron en diferentes puntos como el banco de O Carniceiro y de As Maruxas Pequenas, ambos en el interior de la ría, junto al puente romano de O Burgo. Mar asegura que también se acudió a la punta de la playa de Santa Cristina y a A Baixada.

Limpieza > Mientras, se continúa trabajando para eliminar los restos de queroseno. Las labores de limpieza se centran principalmente en el área de servicio de la autopista donde se produjo la fuga. Ahí, según informan desde el Ayuntamiento de Culleredo, se procedió a retirar la tierra afectada por el combustible por otra nueva. Se excavó hasta un metro de profundidad en el entorno de la gasolinera y junto a la vía del tren. Frente a lo que se preveía, finalmente no fue necesario desbrozar la zona para proceder al cambio de sedimentos. Dichas labores fueron desarrolladas por la empresa de limpieza contratada por la compañía propietaria del camión de queroseno que continúa utilizando carbón activo para eliminar el combustible acumulado en un humedal cercano.
Precisamente al ser este entorno el más afectado por el queroseno, durante el día de ayer se esperaba la llegada de técnicos especializados para analizar tanto el agua como la tierra del lugar y determinar así hasta dónde ha afectado la contaminación.

Control > Esto sucedía en el punto en donde se originó el vertido y en el regato de Os Pelamios, a través del cual llegó el combustible a la ensenada. Pero en la ría, responsables de la Xunta también tomaban muestras del agua, con el objetivo de conocer la evolución del vertido y su nivel de evaporación, puesto que, a simple vista, parece que una parte importante ya ha desaparecido. De hecho, el olor no es tan fuerte en la zona.
Desde la Xunta advierten de que lo más probable es que los resultados de los exámenes, que tardarán en torno a siete días en llegar, den índices disparados de hidrocarburos. Entienden que esta situación es normal por la cantidad de litros que llegaron al mar. Parece que, pasado este punto álgido, las analíticas de final de semana tendrán más validez, según informan desde la delegación del Gobierno autonómico.